No es raro que todo aquel que se compra un dispositivo electrónico busca que le dure el máximo tiempo posible, especialmente, si se trata de un móvil, ya que se ha convertido en nuestra agenda y nuestra herramienta de trabajo y de ocio.
Sin embargo, cada vez es más frecuente que tengas que cambiar el smartphone cada poco tiempo. Detrás puede existir una razón tecnológica, es decir, que los propios fabricantes deciden cuál es su fecha de caducidad o, por el contrario, aquellos hábitos diarios que haces sin darte cuenta y que podrían estropear la batería interna de tu móvil. Esta situación se agrava con la llegada del calor, ya que puede alterar el funcionamiento de los teléfonos móviles.
Las altas temperaturas pueden afectar al rendimiento de tu dispositivo. Para evitar que esto suceda, la empresa tecnológica SPC y Cadena Dial brindan seis consejos clave para evitar alterar el funcionamiento del móvil y, por ende, alargar su vida útil.
¿Cómo proteger el móvil del calor?
Las altas temperaturas son el gran enemigo de la tecnología, ya que en muchas ocasiones alteran su funcionamiento habitual. El móvil, al ser un medio que va con el usuario a todas partes, se convierte en el principal perjudicado. Para evitar que se sobrecaliente y deje de funcionar, lo habitual sería tomar consciencia del problema que supone y luego trata de cambiar los malos hábitos que haces sin darte cuenta por estos otros que podrían ayudar a alagar su fecha de utilidad.
1. Usar fundas finas para la carga del móvil
Las fundas, además de ser un elemento para identificar tu smartphone en la mesa, también sirven para proteger tu dispositivo ante las constantes caídas y golpes. Sin embargo, y especialmente en verano, es importante tener precaución con el tipo de de fundas que utilizas, ya que si usas una gruesa es posible que el calor del móvil se disipe más lentamente, algo que puede afectar directamente al funcionamiento de tu móvil.
Por eso, desde SPC recomiendan que en verano se utilicen fundas más finas y sin tapa, ya que retienen menos el calor. En caso de sobrecalentamiento, lo mejor es que retires la funda para facilitar que se enfríe rápidamente.
2. Controlar la temperatura del móvil ajustando el brillo
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El uso continuado del teléfono puede llevar a que se caliente con facilidad. Por lo que si sabes que vas a utilizar el dispositivo con frecuencia durante las próximas horas, ya sea para hacer consultas, hacer fotos y vídeos o simplemente llamadas, SPC recomienda ajustar el brillo y usar el modo oscuro de la pantalla, ya que así conseguirás que no se lleguen a niveles tan altos de calentamiento.
En el caso de que notes que el móvil empieza a calentarse en exceso, recuerda poner el móvil en modo avión, dejarlo en un lugar fresco y esperar hasta que la temperatura acabe bajando.
3. Cargar el smarthpone en sitios frescos sin luz directa
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Por obvio que resulte, cargar el smartphone en un lugar fresco es necesario para su buen funcionamiento. Encontrar un lugar fresco, bien ventilado a la sombra sería lo ideal. De no ser así, la temperatura interna del dispositivo se dispararía retrasando su rendimiento.
Por ejemplo, uno de los malos hábitos que tiendes a hacer es dejar el móvil cargando debajo de la almohada, algo que a priori puede resultarte práctico pero que resulta una auténtica fatalidad para tu dispositivo.
4. Evitar cambios bruscos de temperatura
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Si las altas temperaturas han ralentizado el funcionamiento de tu dispositivo, desde SPC recomiendan dejarlo reposar para que poco a poco se vaya atemperando. Este proceso debe de ser natural; por lo que no vale que lo metas en el frigorífico o en el congelador para acelerar este proceso, ya que este contraste de calor y frío extremos podría afectar a diversos componentes del dispositivo.
5. Utilizar cargadores oficiales
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Es posible que se te haya roto el cargador original del móvil o simplemente que le hayas perdido, y en su lugar, en vez de volver a adquirir el original, te conformes con otro que has comprado en la tienda más cercana de tu casa y que presentan mala calidad. Pese a que esto pueda salvarte de un apuro durante una situación determinada, la realidad es que usarlo con frecuencia podría alterar el rendimiento de la batería de tu móvil ya que el proceso se ralentizará y lo que es peor, acotará la vida útil de tu dispositivo.
Cuando se rompe el cargador original del móvil y adquieres otro, a veces, no te das cuenta, pero cuando al salir a buscar uno nuevo tiendes a escoger aquel que peor calidad tienen. Esto puede afectar al rendimiento de la batería porque hará su cometido de forma muy lenta y acortará la fecha de utilidad de tu dispositivo.
6. Recurrir a auriculares para hacer llamadas
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Si eres de los que está todo el rato pegado al teléfono y lo que es peor recibiendo y haciendo llamadas, la mejor opción es que recurras a unos auriculares, ya que esta situación podría llevar a que el teléfono se sobrecaliente hasta tal punto que resulte molesto para oreja. Por eso, lo mejor es evitar que se reproduzcan estas situaciones y buscar alternativas. Para ello nada mejor que recurrir a unos cascos, ya sean inalámbricos o no.
