Y es que colocándolas así lo normal es que la parte ancha de la cuchara, la que toca la comida, quede dentro de las rejillas de la cesta de los cubiertos recibiendo así menos agua y jabón, además de que se enjuagarán y se secarán peor. Otro riesgo de cometer este error, explican desde 20Minutos,«es que las cucharas pueden dañarse entre sí, perder el brillo o incluso rayarse. Esto puede afectar también a la estética y la calidad de los cubiertos».

Desde el mismo medio explican cual es la mejor manera de colocarlas para optimizar su limpieza, que es justamente la contraria, «con el mango hacia abajo y la parte que toca la comida hacia arriba».

Cómo colocar las cucharas en el lavavajillas y otros consejos

Close up of open dishwasher with clean dishes and cutlery

Colocándolas así conseguiremos que queden más limpias ya que el agua y el jabón llegarán mejor, además se protegen entre si «ya que al estar separadas y con la parte más resistente hacia arriba, no se rozan ni se rayan».