Parece que la más afectada por un tipo de infección del cuero cabelludo por hongos que se viene detectando desde hace un par de años por los médicos dermatólogos de distintas ciudades españolas, es la población masculina adolescente. Algo que se conoce como tiña del cuero cabelludo, cuyos casos han aumentado siginificativamente.
Ante la preocupación suscitada por ello, un grupo de médicos de esta especialidad se han reunido para realizar un trabajo colaborativo realizado en el ámbito de la Academia Española de Dermatología y Venereología, que se ha publicado en la revista Actas Dermo-Sifiliográficas.
«Brote de dermatofitosis en región de cabeza y cuello asociadas al rasurado en peluquerías: Estudio descriptivo multicéntrico de una serie de casos», este es el nombre del estudio que muestra tal y como explican desde 20Minutos, «los hallazgos clínicos y epidemiológicos en un estudio retrospectivo de 107 casos recogidos por un grupo numeroso de dermatólogos españoles»
Causas del brote de tiña
Leonardo Bascón, dermatólogo del Servicio de Dermatología del Hospital General de Granollers y autor principal de estudio explica en el mismo que «Las lesiones aparecieron predominantemente en la nuca y el área temporal, que son las zonas donde se apura más el rasurado o degradado». Se trata de lesiones descamativas que en algunos casos pueden cursar con inflamación, zonas rojas e incluso supuración. Del estudio además se deduce que el hongo causante en la mayoría de los casos fue el Trychophyton tonsurans.
La tiña de la cabeza es muy contagiosa y afecta sobre todo a niños entre seis meses y doce años varones predominantemente. Los médicos explican el aumento de contagios por la moda de cortarse el pelo en las zonas occipital y temporal de la cabeza mediante degradado o rasurado. Un corte que hay que retocar semanalmente y que puede haber favorecido el contagio de este tipo de enfermedad a través de las maquinillas eléctricas infectadas.
Un contagio que según explican los autores del estudio, se produce por el contacto con las esporas del hongo con el cuero cabelludo y los folículos pilosos del paciente, de ahí la importancia de identificar a los pacientes afectados para limitar así el contagio.
Síntomas como descamación, pérdida o caída del pelo, prurito y dolor, inflamación de la zona, áreas rojizas, son sospechosos de contagio pero este debe ser confirmado mediante cultivo de hongos y tal cómo explica el doctor José Ignacio Galván, uno de los coautores del estudio, «Cuanto más precoz sea el diagnóstico, más favorable y menores riesgos de secuelas tendrá el paciente» y añade que, «Después de un correcto diagnóstico, existe un tratamiento específico que permite la curación».
