Días después Boris Izaguirre, escribía en una columna en el ‘El País’, algo que provocó la ruptura de su amistad con Tamara Falcó, explican desde divinity.es, «En una suerte de esfuerzo mancomunado conseguimos alejar a Tamara del engañoso Íñigo Onieva. Ahora deberíamos repetir esfuerzo para alejarla de esa ideología odiosa que la rodea».
Tamara explicó después en El Hormiguero, dónde colabora, que eran declaraciones sacadas de contexto y que en ningún caso se referían a un colectivo LGTBI. Después Boris explicaba en otra columna, que nunca sintió que Tamara hiciera ninguna declaración homófoba. Pero para entonces ya era tarde y el escritor ya estaba más que distanciado de Tamara y su madre Isabel Preysler.
No obstante el presentador explicó en una entrevista con ¡Hola! que hablaron por teléfono antes del encuentro, que quiso avisarla de que iba a ir al desfile para evitar tensiones y sorpresas, «Sobre todo, porque yo no creo en las sorpresas y no me no me sientan nada bien. Ella me respondió inmediatamente y me dijo: ‘Estaré encantada de verte el jueves’. Entonces, vine ya más tranquilo. En realidad, lo que le dije fue que tenía unos nervios terribles, pero por el desfile de ella», dijo.
Los que lo presenciaron han dicho que Tamara estaba «muy receptiva». Por su parte el presentador, que según explica el mismo medio considera que el distanciamiento fue culpa suya, explicó, «Pero no sé si también, en el fondo, es que la deseo tanto que me imagino cosas. Sin duda, yo creo que ha sido un importante avance».
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