Antonio Orozco

Antonio Orozco: los mejores mensajes de amor para escribir en el espejo

El artista fue recibido con uno de ellos en su llegada a la capital madrileña

Noelia Bertol

¿Alguna vez te han dejado mensajes de amor en el espejo? Bien aprovechando el vaho de la ducha o pintado con un pintalabios. Un bonito gesto perfecto para sacar sonrisas en nuestra pareja o aquellas personas que tanto queremos. Pues así fue justo como recibieron hace unos día a Antonio Orozco en su llegada a Madrid.

El artista compartía el gesto de bienvenida que habían tenido con él. «Bienvenido a tu casa en Madrid. La vida es un regalo que se disfruta en cada nota«, se puede leer, además de un pedazo de la canción Llegará, del artista catalán: «Los abrazos que hablan, momentos que marcan…»

Historia de Instagram de Antonio Orozco
Vía @antoniorozco10

Frases de Antonio Orozco perfectas para escribir en los espejos

Una idea fabulosa para tener con las personas más importantes de nuestra vida. Eso sí, si vas a tener el detalle, procura que luego esa persona no se tenga que encargar de limpiar dicho espejo, ¡eso sería un regalo ‘envenenado’!

Y qué mejor que recurrir a las frases más bonitas de las canciones de Antonio Orozco para dedicar bonitos mensajes a esa persona especial. Aquí te dejamos algunas de nuestras favoritas:

  • Qué bonito es entender que cada paso que tú des, también yo lo daré (Ya lo sabes)
  • No hay más ilusiones que tenerte, más riquezas que quererte (No hay más)
  • Eres la razón de mis mañanas, eres todas mis batallas y eres una lluvia fresca en pleno abril (Eres)
  • Una y otra vez sería capaz de dibujar y salpicar con un pincel el mar de tu mirar (Una y otra vez)
  • Y mi suerte fue encontrarte, si no habría que soñarte (Mi suerte fue encontrarte)
  • Tenerte es como ser la rima del amor perfecto (Tenerte es como ser)
  • Se pueden llenar los siete mares de valientes y nunca llegaría a parecerse ni a un cuarto del valor que tú sostienes (Mi héroe)
  • Yo estoy hecho de pedacitos de ti, de tu voz, de tu andar, de cada despertar, del reír, del caminar (Pedacitos de ti)
  • No hay distancia más grande que donde tú estás (No hay más)

Y tú, ¿cuál añadirías?

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