En estos días tan festivos y donde la alegría predomina y las celebraciones también, hay elementos que utilizamos para dar la bienvenida al nuevo año o para alguna reunión con nuestros amigos que pueden perjudicar a animales y a personas muy sensibles. Si no sabéis de lo que os estamos hablando, son los petardos. Por este motivo, Andrés Suárez ha querido hacerse eco en sus redes sociales de la parte más negativa de esos objetos que la sociedad utiliza para las celebraciones.
Bajo el lema Stop petardos, el gallego ha contado en su perfil una historia que vivió en primera persona con una amiga cercana: «El año pasado por estas fechas pedí por vez primera el alto a los petardos. Lo hice después de que una amiga se pasara la noche en urgencias con su hijo autista«, comenzaba escribiendo en el hilo que ha abierto en Twitter.
El año pasado por estas fechas pedí por vez primera el alto a los petardos. Lo hice después de que una amiga se pasara la noche en urgencias con su hijo autista. Os invito a descubrir los efectos que la pirotecnia produce en personas con esta enfermedad. 👇
— Andrés Suárez (@andressuareztwi) December 29, 2022
Posteriormente, el artista ha ido desgranando todos los efectos que la pirotecnia produce en las personas autistas. El principal motivo que le ha llevado a visibilizar los problemas que pueden acarrear esos explosivos, es el siguiente: «Lo hice después de casi perder a mi perra. Lo hice después de que un allegado perdiera a su perro a causa de un infarto producido por una traca«, admitía.
Pero si hay algo doloroso en todo esto y que Suárez no ha querido dejar de mencionar en su hilo son algunas respuestas que ha recibido al respecto: «‘ que se jodan’, ‘que se muera tu perra’ o ‘yo lo voy a seguir haciendo‘; todos sabemos a estas alturas que de esta salimos mejores personas. Recibí también muchos mensajes aconsejándome ‘silencio’, ‘no te metas en estos asuntos‘», reflejaba el artista.
Tras contar todo ello, Andrés Suárez ha querido plantear un reflexión para todos sus seguidores: «Desconocedor de si la solución es habilitar lugares específicos para tal ‘diversión’ y cesar así tanto sufrimiento, hoy no dejo de preguntarme qué clase de persona sería si dejara de luchar por lo que creo solo por quedar bien; cómo dormir al silencio cobarde«.
Para zanjar su reflexión sobre el uso de la pirotecnia en esta fechas, el gallego ha escrito lo siguiente: «Os deseo unas Navidades llenas de paz y de amor, creo que estos días van de eso».
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