Lo tiene todo para arrasar más allá de nuestras fronteras y lo que vimos la noche del pasado 5 de diciembre en el WiZink Center, en lo que fue su último concierto del Alpha Tour hasta la fecha, es tan solo una pequeña carta de presentación. Este es ya el tercer concierto en ese mismo recinto en tan solo un mes y, además, también es el tercer pleno, ya que en todos ellos ha colgado el cartel de entradas agotadas.
Esta es ya la tercera gira en solitario de Aitana y, sin duda, la más imponente de todas. Un show que está a la altura de los artistas internacionales más grandes y hecho por una joven de 24 años que acaba de despegar. Una auténtica locura si te paras a pensarlo. Pero es que la catalana ya pisa las tablas como si llevase toda una vida ahí.
Alpha Tour ha dejado claro que es una propuesta sólida y entretenida, con una producción envidiable y de lo más profesional, que se combina a la perfección con un repertorio que te hace disfrutar desde que se apagan las luces del recinto. Entre canción y canción hay interludios que te hacen sentir en una auténtica rave de la ruta del bakalao, pero también hay espacio para los discursos y las historias que hay detrás de algunos temas.
Cuando Aitana dio el primero de los pequeños sermones de la noche, dijo que el verdadero propósito de este concierto era que todo el mundo lo pasase en grande, y así fue. Un concierto de Aitana, aunque muchos no lo crean, es un concierto creado para todos los públicos. Allí se congregaron personas de lo más variopintas. Todos los colectivos y rangos de edades estaban perfectamente representados y todos salimos por las puertas del WiZink Center con la misma opinión: Aitana es una auténtica diva del pop y su show fue espectacular.
Desde los increíbles visuales que se proyectaban en las grandes pantallas tras el escenario y el gigantesco espectáculo de luces que se formaba, hasta las más creativas coreografías que ofrecía el talentoso cuerpo de baile al que Aitana se amoldaba a medida que cantaba sus mejores canciones casi sin despeinarse, demostrando que también puede cantar y bailar al mismo tiempo y hacerlo con total confianza y soltura.
Como decíamos, este es el tercer WiZink Center que llenaba la artista en tan solo un mes, después de haber arrasado también en los anteriores conciertos de la gira por España y Latinoamérica. Aitana no dejó de dar las gracias a su público por el apoyo incondicional que le ofrecen cada día y por eso, ella ha respondido con un regalo de Navidad de lo más imponente. Aprovechando la última cita del Alpha Tour este año, anunció que esta era no acaba aquí. El 28 de diciembre del año que viene le espera un Santiago Bernabéu a ella y a sus fans. De este modo, Aitana se convierte en la primera artista femenina española en anunciar un concierto en el que será el nuevo Estadio Santiago Bernabéu, donde se estima que puedan entrar más de 60.000 personas, siendo este su concierto más grande hasta la fecha.
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