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El virus de Marburgo, la enfermedad que ha alertado a la OMS

Los dos primeros casos se han detectado en Ghana

El pasado viernes la OMS informó de que se habían detectado en Ghana dos posibles casos de fiebre hemorrágica de Marburgo, que serían las primeras de este virus muy similar al ébola, que se detectaran en ese país. Se han encontrado concretamente al sur en la región de Ashanti y están pendientes de confirmación por el Instituto Pasteur de Dakar, en Senegal, tras haber sido analizadas en el Instituto Memorial Noguchi de Investigación Médica.

En ambos casos los afectados fallecieron y presentaban síntomas como diarrea, fiebre, náuseas y vómitos. Francis Kasolo, representante de la OMS en Ghana, explicó en un comunicado que, «Las autoridades sanitarias están investigando la situación sobre el terreno y preparándose para la respuesta a un posible brote».

Además de explicar que, «Estamos trabajando con el país para incrementar la detección, rastrear contactos y estar preparados para la propagación del virus». De hecho el Ministerio de Sanidad ghanés, ha confirmado  la detección de los dos casos este jueves y ha confirmado que que 34 contactos de los dos fallecidos fueron identificados y están siendo observados en cuarentena mientras se realizan más investigaciones.

El virus de Marburgo, la enfermedad que ha alertado a la OMS

La enfermedad empieza de manera brusca con fiebre alta, dolor de cabeza intenso, dolores musculares y mucho malestar y al tercer día puede aparecer diarrea acuosa intensa, dolor y cólicos abdominales, náuseas y vómitos.

Tal y como explica 20 Minutos, entre los cinco y siete días algunos enfermos tienen «manifestaciones hemorrágicas graves  y los casos mortales suelen presentar alguna forma de hemorragia, a menudo en varios órganos. El mismo medio explica que según recoge la OMS, «la diarrea puede persistir una semana. En esta fase se ha descrito que los pacientes presentan ‘aspecto de fantasma’ debido al hundimiento de los ojos, la inexpresividad facial y el letargo extremo». 

Los murciélagos de la fruta son los trasmisores de este virus y entre los humanos se trasmite por  contacto directo con fluidos como la sangre, saliva, vómitos u orina de personas infectadas o superficies y materiales contaminados con dichos líquidos. Además la OMS ha informado de que «No se ha demostrado la eficacia de ningún tratamiento para neutralizar este virus».