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El tenso reencuentro de Paz Padilla con sus compañeros de Sálvame

Se encontró con Belén Esteban y Kiko Hernández en maquillaje

Una discusión con Belén Esteban fue el origen de la marcha de Paz Padilla de Telecinco. Ahora la humorista regresa a Mediaset, donde ya está grabando las pruebas de un nuevo programa que pronto se incorporará a al parrilla de la cadena.

Esto ha provocado el encuentro con algunos de sus compañeros de Sálvame en maquillaje, donde ayer mismo se encontraba con Kiko Hernández y Belén Esteban. El tema, como no podría ser de otra manera, salía en el programa.

María Patiño comenzaba diciendo: «Parece ser que hay más amistades rotas de las que yo pensaba, porque te has encontrado a Paz Padilla, ¿no?»,  a lo que ella contestaba inmediatamente que no había sido la única que se la había encontrado. «Me la he encontrado yo, se la ha encontrado Kiko Hernández, Rafa Mora… No he sido la única», y además explicaba que la gaditana ni le había saludado en ese casual encuentro.

 Paz Padilla se reencuentra con Belén Esteban y Kiko Hernández

Patiño volvía  a insistirle: «¿Paz no te ha saludado? Te ha visto seguro», «Hombre, teníamos unas cristaleras que parecían las del Santiago Bernabéu. Y a Rafa Mora sí le ha saludado«, explicaba Esteban.

Pero parece ser que Paz tampoco saludó a Kiko Hernández, algo que a María Patiño le extrañaba por la buena relación entre ambos: «El tema de Belén me llama la atención, pero me llama aún más que no haya saludado a Kiko Hernández; porque recuerdo perfectamente el último día de Paz Padilla aquí y cómo con Kiko había una relación de buen rollo hasta el punto de que se apoyó en Kiko Hernández», y a continuación Kiko daba su versión.

«A mí lo que me llama la atención es que una persona que da miles de entrevistas todas las semanas, todos los días, a quien la quiera escuchar, diciendo que ella solamente está para repartir amor y que es otro ser de luz que da amor; desde luego llegue a maquillaje y no salude a sus compañeros a los que ha dado amor durante 13 años. Pero a mí me ha dado lo mismo.»

Esteban terminaba diciendo que si la hubiera saludado incluso le hubiera gustado hablar con ella, «Y le hubiera dicho que se ha equivocado, que no somos sus enemigos».