El té azul, o té Oolong, procede del sudeste asiático y se obtiene de la Clitoria que le da este característico color azul que puede cambiar a color púrpura si le añadimos unas gotas de limón o a rojo si lo mezclamos con hojas de hibisco.
Una de sus propiedades más conocidas es que puede ayudarnos a adelgazar, sobre todo la zona abdominal. Esto es gracias su contenido en catequina EGCG, galato de epigalocatequina, que acelera el metabolismo y, por tanto, el proceso de quema de calorías.
Además, tiene propiedades antiinflamatorias y diuréticas, evitando así la retención de líquidos tan frecuente, sobre todo en esta época del año. También contiene cafeína que hace que nos ayude a acelerar el metabolismo y el consumo de grasas, algo para lo que será necesario tomar al menos tres tazas al día y, por supuesto, combinarlo con una dieta sana y ejercicio.
Pero estas no son sus únicas propiedades. El té azul es además es antipirético, es conocido como el paracetamol natural, ya que baja la fiebre. Además, es un gran antioxidante, por eso ayuda a combatir el envejecimiento celular y la formación de radicales libres. También favorece que las grasas en nuestro hígado se metabolicen mejor, por lo que ayuda a reducir el colesterol de manera natural.
Lo recomendable es tomar entre dos o tres tazas diarias sin azúcar ni otro edulcorante, y una hora antes de las comidas. Prepáralo añadiendo las hojas de té en una taza de agua recién hervida y dejándolo reposar tres minutos. Después cuélalo y ¡listo!
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