Desde su perfil en la red social Instagram, la presentadora explicaba, con todo lujo de detalles, cómo había sido la operación, con el objetivo de ayudar a otras mujeres que pudieran estar pasando por una situación similar.
El motivo no era otro que la detección de dos pólipos en el útero que estarían afectando gravemente a su salud, interfiriendo y provocando múltiples desajustes hormonales.
«Mi cuerpo ha alumbrado dos seres vivos, los ha amamantado y siempre estará para dar abrazos a los míos. Pero de alguna manera siento que ayer mi cuerpo volvió a ser mío», explicaba en la red social.
«Las que habéis llevado un embarazo sabéis que tu cuerpo deja de ser solamente tuyo. Y durante la primera fase de crianza, en el túnel de la entrega total, es de todos», aseguraba la presentadora.
«Ayer ayudé a mi cuerpo, en vez de descuidarme por ignorancia y miedo. Llevaba meses sangrando de manera bestial y ayer lo atajé con ayuda de una ginecóloga genial que me explica las cosas para que las entienda», aseguraba junto a la imagen que ha posteado.
«Ahora me siento llena de poder, porque ya no voy a ser una mujer sangrante 20 días al mes. Mi cuerpo vuelve a ser mío y nada me puede parar. Os animo a que os chequeéis los bajos señoras y señoritas. No estamos obligadas a estar incómodas por ser mujeres». finalizaba
Tania ha aprovechado su paso por el quirófano para implantarse un diu hormonal denominado Kyleena. Se trata de un pequeño dispositivo intrauterino en forma de T que libera lentamente la hormona levonorgestrel en pequeñas cantidades.
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