La crisis pandémica ha hecho fuertes estragos en la economía de muchas personas de nuestro país dejando a algunos en paro y a otros en ERTE. Con la Covid-19 muchos trabajadores acudieron al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) para poner en regla su nueva situación laboral y económica. De esta manera, este servicio se convertía en el chaleco salvavidas para muchos ciudadanos que se quedaron sin ninguna fuente de ingresos.
Ante esta situación tan delicada, el Ministerio de Trabajo, al que pertenece el SEPE, aprobó adelantar todas las prestaciones de los demandantes. Así muchas familias sin apenas recursos podían cobrar una semana antes de lo estipulado a través de las propias entidades bancarias, que se encargaban de ejecutar ese adelanto.
Sin embargo, ahora la situación va a cambiar. Después de dos largos años, el propio SEPE ha anunciado a través de su portal que, a partir del próximo mes de mayo, tanto la prestación por desempleo como el cobro del ERTE se harán efectivos el día 10 de cada mes. “El pago de las prestaciones por parte del SEPE se produce del día 10 al 15 de cada mes. Debido a la urgencia social provocada por la pandemia se llegó a un acuerdo con las entidades bancarias para adelantar el pago a la primera semana de mes», ha detallado.
Por tanto, dada la situación pandémica las circunstancias han cambiado. Ya no existe la posibilidad de percibir el dinero los primeros días del mes. El SEPE ha notificado también este cambio a los bancos para que se rijan a los plazos estipulados nuevamente, que establecen que será el día 10 de cada mes la fecha estipulada para el cobro.
Aunque, no hay que olvidar que sí cae festivo, esa prestación se recibirá el siguiente día hábil. De esta forma, el SEPE ha vuelto a recuperar las fechas anteriores a estallar la pandemia.
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