La pandemia por Covid-19 puso sobre la mesa un tema del que no se hablaba mucho hasta ese momento. Muchos mayores vieron cómo sus hijos no se ocupaban de ellos todo lo que les hubiera gustado. Con la excusa de evitar contactos con los mayores algunos aprovecharon para no visitar a sus mayores.
En estos días el asunto vuelve a acaparar noticias ya que la Asociación Cultural de Mayores de Fuenlabrada ACUMAFU ha iniciado una petición en Change.org bajo el título “si no te cuidan que no hereden” en la que se piden firmas para que se modifique el Código Civil.
En la actualidad la ley obliga a los padres dar a sus hijos un tercio de la legítima. Tal y como está redactada, para que unos padres deshereden a un hijo se deben dar unas condiciones que tiene que validar un juez. Los padres deben demostrar ante la Justicia que han sufrido maltrato físico, psicológico o incluso la retirada de la manutención,.
La Asociación pide que se actualice el Código Civil que considera anticuado ya que se elaboró en el año 1889. Creen que la sociedad y sus normas deben avanzar. “Los mayores demandamos un cambio realista con las circunstancias actuales: queremos la libertad de poder hacer con nuestro patrimonio lo que queramos. Basta de que la Ley nos obliguen a regalar dinero a quien no quiso cuidarnos y nos hizo sufrir”.
Así de clara es la petición en la que se narra brevemente el caso de Fernando, de 78 quien ha estado privado de ver a sus nietos durante ya diez años por una discusión con su hijo y su nuera. Para él y para otros muchos casos no es justo que se corten las relaciones familiares pero que la Ley permita que reciban un tercio de la herencia.
Las herencias se dividen en tres partes o tercios. Se trata del tercio de la legítima, el tercio de mejora y el tercio de libre disposición, según explica Rodenas Abogados. El Código Civil marca a quién se podrá dejar cada una de estas partes y la legítima siempre es para los herederos. Lo que el testamente hace es ayudar a distribuirlas.
En algunas comunidades autónomas como Aragón, País Vasco, Navarra y Cataluña la situación es algo diferente y se establecen los pactos sucesorios. La familia se debe reunir en vida y acordar como será la herencia. Así por ejemplo, en el País Vasco se puede repartir a cualquiera de los hijos la legítima.
Tal y como explica la Asociación en los dos últimos años en los que hemos convivido con el coronavirus se han recibido casi 4.000 consultas sobre la posibilidad de desheredar a los hijos. Aunque la cifra de consultas sea muy alta, finalmente pocas personas llevan los trámites hasta el final. La Asociación las cifra en unas 18 aproximadamente.
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