Cuando menos lo esperas la vida golpea con sus reveses. Eso es lo que le ha pasado a Raquel del Rosario, que estos días se veía obligada a despedir de forma prematura a una gran amiga. La vocalista de El sueño de Morfeo lleva años afincada en Estados Unidos, donde ha formado una bonita familia con su marido, el fotógrafo Pedro Castro.
Allí ha hecho grandes amistades, entre las que se encontraba Nunu, que recientemente fallecía. La artista ha querido despedirse de ella a través de una emotiva carta en sus redes sociales con la que ponía en valor la amistad que les unía y los momentos de calidad que compartieron durante los últimos años.
«No le gustaba salir en las fotos, por eso no tengo ninguna con ella, pero allá donde íbamos siempre me decía: ‘Raquelinda (nadie se libraba de sus apodos cariñosos) ponte ahí para una foto’ y siempre me hacía la foto que yo me haría. Teníamos una forma muy parecida de mirar«, comenzaba escribiendo Raquel del Rosario junto a una fotografía en la que aparece una figura de una mujer en la playa y numerosas gaviotas volando alrededor.
Esta además revelaba cómo era disfrutar de su compañía: «Hacer un plan con ella era crear una colección de anécdotas graciosas y surrealistas que siempre recordábamos entre risas y vinos en ‘el pescaito’ de Malibu», un lugar que era muy especial para esta. «Conducía cada día desde el otro lado de la ciudad sólo para dar un paseo por la playa o perderse por alguno de sus cañones«, añadía.
Una amiga que se apuntaba a todo en esa necesidad de exprimir la vida al máximo: «Ella decía que sí a todo y luego ‘ya veré cómo hago’, y de alguna manera lograba hacerlo. Siempre estaba ‘agotada pero feliz’ porque quejarse nunca estaba en sus planes, que eran muchos«.
Raquel del Rosario y una despedida que llegó antes de tiempo
«Para lo que no estábamos preparados, Nunu, era para despedirte tan pronto«, lamentaba Raquel del Rosario. No obstante, la artista ha encontrado la manera de enfrentar el dolor de su partida, y es recordando todos los momentos felices que han compartido juntas. «Hoy solo puedo agradecer el tremendo placer de haber compartido contigo un pedacito de esta experiencia llamada vida«, añadía la canaria.
«Dejas una familia de amigos preciosa en Los Ángeles, esa familia que tanto cultivabas y amabas. Te honraremos disfrutando la vida y apreciando su belleza como tú lo hacías«, agregaba Raquel del Rosario, que terminaba la carta ‘celebrando’ la fiesta que se iba a montar en el cielo con su llegada: «¡Saquen un spiral bien fresquito que la pelirroja de risa escandalosa ha llegado!«
