Te hemos hablado de como guardar el queso para que dure más, de cual consumir para no engordar e incluso de como hacer una tarta de queso en el microondas, pero a la hora de comprarlo, ¿sabes distinguir entre un queso artesanal y uno industrial?. Te contamos cómo hacerlo.
Hay algunos aspectos en los que debemos fijarnos a la hora de distinguirlos, el color, el olor, la textura y el aspecto además por supuesto del sabor, son claves. Y es que los artesanales siempre huelen, tienen aroma a algo, a rancio, a ácido, a amoniaco, a leche…algo que en el caso de los industriales no ocurre, no tienen olor o este será dulce.
Otros rasgos en los que debemos fijarnos son el color y el aspecto. Por regla general los quesos artesanales suelen tener moho repartido de manera irregular por la corteza, es algo natural de este tipo de queso y se puede comer. En el caso de los industriales su corteza de tono suave que varía entre el blanco y el amarillo según el queso, una corteza que es prácticamente plástico. Además tienen una textura mucho más artificial y una forma mucho más bonita y estética. Sin embargo no hay dos quesos artesanales iguales.
¿Sabes distinguir un queso artesanal de uno industrial?
Dónde seguro que no nos vamos a equivocar es al comerlos ya que su sabor es definitivo para distinguirlos, varía mucho en cada caso. Para producir los quesos industriales se utiliza leche pasteurizada mientras que, en los artesanales, se emplea leche cruda. Por eso el sabor de los artesanales es mucho más fuerte y con muchos más matices que en el caso de los industriales que es mucho más dulce. Y además en el primer caso se trata de un sabor que permanece en la boca algo que no sucede con los industriales.
En el caso de los quesos artesanales el respeto de los tiempos y el mimo y cuidado es mucho mayor que en el caso de los industriales, ya que para que sea completamente artesanal debe pasar por todas estas fases: la coagulación, el corte y la extracción del suero, el prensado, el salado y la maduración .