El mataleón es una técnica que consiste en que el atacante estrangula con su brazo a la víctima. La persona atacada siente la enorme presión en su cuello y como consecuencia de que no circula el riego sanguíneo pierde la conciencia pudiendo desmayarse. Este ataque se realiza por detrás, así pilla por sorpresa a la persona, que tiene muy complicado defenderse. Si el atacante hace mucha fuerza puede provocar lesiones en la tráquea. Este modo de asalto es empleado por los ladrones que aprovechan cuando la víctima se desploma para hacerse con sus pertenencias.
El mataleón es una llave de Jiu jitsu, un arte marcial, no un juego para hacer en el patio de un colegio. En varias ocasiones, la Policía Nacional ha advertido sobre este reto que aunque ahora vuelva a salir en los medios, no es nuevo ni la primera vez que un menor es atacado así.
Lo habitual es que sean niños y adolescentes los que se sumen a estos retos que ponen en riesgo la salud de las personas. En plena pandemia por Covid-19 vimos como muchos se unían al «reto del coronavirus» que, consistía en chupar inodoros, con el objetivo de acabar contagiado. Muchos lo lograron y ocuparon camas en las urgencias de los hospitales.
Los padres y el profesorado debe estar atento a lo que pasa en las redes y en las aulas para que no se difundan estos retos peligrosos. Las redes sociales pueden llegar a ser peligrosas si los menores intentan conseguir «me gusta» para tener reconocimiento entre sus amigos y conocidos.
Otros retos peligrosos que han circulado por las redes sociales es el reto del auto estrangulamiento por el que la persona se debe grabar con algo que le apriete atarse al cuello un objeto para desmayarse. Otro reto es el de comer cereales con leche tumbado con la boca abierta. Con este reto hay un alto riesgo de ahogarse con un trozo de comida.