El pasado martes contábamos que Belén Rodríguez se había convertido en una de las colaboradoras más polémicas del equipo de Sálvame y que había tomado la decisión de dejar de seguir a varios de sus compañeros del programa en las redes sociales. El que mayor decepción se llevaba de toda esta situación era Jorge Javier Vázquez, que tras mantener una conversación por mensajes, decidió bloquearla. «Recibo un mensaje… Que yo únicamente cogí el móvil y le dije: ‘Vete a la mierda‘» .
Antes de que sucediese ese último episodio, el pasado viernes el programa decidió mandar a María Patiño y Terelu Campos a las puertas de su hogar para tratar que saliese a dar la cara. Por este motivo, el plató decidió enviar este pasado martes a un colaborador a la calle de Belén Rodríguez , pero concretamente a casa de Fernando, uno de los vecinos espía que aparecieron el pasado viernes en Sálvame.
Lydia Lozano aparecía ante las cámaras vestida de teniente militar.»Atención a todas las unidades, el pájaro está en el nido, esta mañana a las 11:40h Belén Ro salía de Málaga, doy fe de que el objetivo ya está en su bunker. La misión de vigilancia está en marcha«, empezaba anunciado la colaboradora al inicio de Sálvame Limón.
El pasado viernes Belén Rodríguez envíaba a La fábrica de la tele un burofax para que dejasen de hablar de ella, pero parece que al programa no hizo caso a ese escrito y ha seguido investigando sobre los movimiento que hace esta mujer.
La policía aparece en casa de Belén Rodríguez
Uno de los momentos más comentados de la tarde de este pasado martes, fue cuando en pleno directo de Sálvame la policía aparecía en casa de Belén Rodríguez. «Están viendo imágenes en directo de la calle en la que vive Belén Ro. Hay un coche de policía y tenemos la sospecha de que Belén pudiera haber llamado a la policía para protegerse y decir que la estamos intimidando», contaba Terelu Campos.
Belén Estaban comentaba: «Yo de verdad si los ha llamado Belén flipo«. Uno de los colaboradores que se encontraba en el lugar de los hechors era Kike Calleja que narraba lo que estaba ocurriendo a sus compañera y a los espectadores: «Hace unos minutos ha llegado Belén Rodríguez junto a un íntimo amigo a su casa. Llegaba con la mascarilla puesta porque no quería que la reconociéramos pero sabíamos como iba vestida. Le hemos metido un micrófono y su reacción me ha sorprendido bastante. Estaba muy nerviosa por entrar en casa».
«Y nada más entrar a su domicilio ha aparecido un coche de policía municipal y han entrado dos agentes en el edificio hablando con ella según vemos desde la casa de Fernando«, proseguía el colaborador. Pero lo que más ha llamado la atención de todo el equipo de Sálvame era que Belén Rodríguez llamase a sus compañeros. «Si esto es así a Belén se le está yendo de las manos. Creo que es más fácil dar un paso para atrás y pedir perdón«, afirmaba Miguel Frigenti.
Los agentes entran en la casa donde se encuentran grabando el programa
«Están identificando a nuestro compañero Antonio que estaba grabando conmigo cuando ha llegado Belén y le hemos sacado totales con toda la educación del mundo como hacemos con todos. Le están pidiendo el DNI para identificarle así que imagino que dentro de un rato subirán aquí para identificarnos a todos«, comentaba Kike Calleja tras llegar a la calle otro coche de policía y cuatro agentes se acercaban al cámara de Sálvame.
Terelu Campos, desde el plató, pedía que continuasen grabando para contar todo lo que ocurría. «Vosotros lo grabáis todos, sin sacar la cara de los agentes se puede grabar todo«. Tras una pausa publicitaria, Sálvame emitía unas imágenes de cuando los agentes se personaron en casa del vecino para identificar a Kike Calleja y al equipo que se encontraba en el piso.
