Y es que debemos cuidar y vigilar nuestras plantas a lo largo de todo el año, pero en esta época de primavera y verano debemos poner un poco más de atención si queremos que nos la devuelvan llenándose de flores y hojas y brotes verdes.
Aunque el calor ayuda a que crezcan bien y sanas, con él también llegan otros prolemas cómo que se secan más fácilmente. Lo normal es que si nos despistamos un par de días sin regarlas se resientan y aunque cuando las reguemos algunas respondan inmediatamente, otras tardan más en hacerlo.
Algo muy frecuente también en esta época del año son las plagas y enfermedades, es importante detectarlas a tiempo para poder actuar. Las más frecuentes son el pulgón, la cochinilla y las mordeduras de insectos y afectan sobre todo al verdor, pero hay productos específicos para tratarlas y evitarlas.
El abono líquido es otro producto que te vendrá bien tener cerca, ya que hace que tus plantas absorban mejor los nutrientes y desarrollen sus raices, los hay incluso concentrados cuyos resultados se notan en apenas una semana, mejorando incluso el crecimiento de tus plantas que tendrán más hojas y flores.
Para evitar las plagas, debes hacerte con un fungicida potente, en el mercado los hay que actuan contra el pulgón, la mosca blanca o la araña roja, además de potenciar las defensas naturales de tus plantas y favorecer su crecimiento.
Los dispensadores de agua te serán también muy útiles a la hora de cuidar tus plantas sobretodo durante estos meses de calor. Los hay de terracota y su uso es muy sencillo, deben meterse en agua diez minutos para que la arcilla se empape, llenar el pequeño depósito que tienen y y funcione cómo un depósito de agua al colocarlos en la tierra.