Utilizar un protector térmico, respetar una distancia de unos 25 cm del secador a nuestro cabello o secarlo de la raíz a las puntas, te ayudará a que no se dañe, pero lo que sin duda va a recuperar tu melena es prescindir del secador durante este verano. O lo que es lo mismo, practicar el air drying o secado al aire.
No obstante, si no quieres que el aspecto de tu pelo se resienta, y mucho menos su salud, es importante que sigas determinadas pautas a la hora de dejarlo secar al aire libre. Te las contamos.
Algo en lo que debemos poner especial atención es en el lavado y en la hidratación, tal y como explica a Vanitatis Eduardo Sánchez, director de la Maison que lleva su nombre: «Independientemente de su textura o grosor, para que un cabello esté libre de encrespamiento es fundamental que esté bien hidratado, ya que cuando está deshidratado es poroso y, por tanto, absorbe la humedad ambiental; se infla, se vuelve rebelde y tiene un aspecto apagado y mate».
Una crema de lavado en lugar de champú limpiará tu pelo de forma mucho más suave y regularás la producción de grasa, acabando con el encrespamiento y logrando un brillo estupendo.
Además, para evitar el frizz, el experto aconseja utilizar acondicionador o mascarilla en la ducha y un producto sin aclarado después. En cuanto a la forma de secarte, hazlo con toquecitos, sin frotar, ya que así solo conseguirás encresparlo. Tal y como explica a ABC Gisela Bosque, «jamás se debe frotar el cabello con una toalla. En cambio, se debe retirar la humedad con suavidad, presionando los mechones, siempre con mucho mimo».
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