Paz Padilla vuelve a ser noticia estos días, en este caso por el cierre de No ni ná, la tienda de ropa y complementos que abrió junto a su hija en Zahara de los Atunes en 2019. A pesar de contar con más de 776.000 seguidores en redes sociales la presentadora y su hija, Anna Ferrer, se han visto obligadas a cerrar el negocio.
Las razones parecen ser tal y cómo explica la Revista Semana, se trata de un cierre temporal por no ser tan rentable como en un principio imaginaban. La presentadora ha decidido cerrar para pensar una nueva estrategia que le permita tener menos pérdidas.
Según explica la Revista, Paz y su hija, “han decidido que la tienda cierre temporalmente y solo abra en temporada alta o cuando haya vacaciones de por medio”.
Ha sido una decisión inesperada pero no definitiva, ya que las dos ya están inmersas en la nueva colección de verano y tienen toda la intención de sacar su marca adelante.
Y es que tal y cómo recoge la misma publicación, «ambas han decidido que la tienda cierre temporalmente y solo abra en temporada alta o cuando haya vacaciones de por medio, por lo que solo estará abierta al público en días contados. La afluencia de gente allí es muy baja y, de hecho, hay poco más de 1000 personas censadas, lo que hace muy difícil que salgan los números si se tiene abierta todo el año.»
Parece que las previsiones que hicieron al abrir su negocio no se han cumplido y la tienda no recibe tantos clientes como pensaban en un principio y aunque la ventas no van mal no son suficientes para amortizar el local y la dependienta durante todo el año.
Hace unos días era preguntada por los periodistas sobre el tema y Paz se mostraba esquiva con respecto al tema sin contestar absolutamente nada sobre su decisión de volver o no a Sálvame. Una actitud algo desconocida en ella que siempre se ha mostrado abierta a conversar y colaborar con los medios sin ningún problema.
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