Este no ha dudado en hablar sobre algunos de los asuntos más personales de su vida, así como el origen de El hormiguero y cómo no todo ha sido fácil durante los 16 años que lleva al frente del programa.
Pablo Motos trató de vender su idea a la televisión, una idea que llegaba de la radio, concretamente del programa No somos nadie, donde llamaban a su audiencia ‘hormiguitas’.
«Cuando íbamos a hacer un programa de televisión, nosotros teníamos ya un millón de hormigas, así que decidimos llamarlo ‘El Hormiguero’. No fue fácil vender la idea del programa. Cuando hablaba de que iban a salir dos hormigas de debajo de la mesa, pensaron ‘este tío es idiota'», contaba el presentador.
🐜 ¡Así nació @El_hormiguero, “un programa de autor”! 😂
¡Pablo Motos se lo cuenta a @joaquinarte! 👀#ElNovatoPabloMotos
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Una vez obtenido el reconocimiento (sigue siendo uno de los espacios con mayores cuotas de audiencia de la televisión), no todo ha sido color de rosa. Pablo Motos recordaba algunos de los días más difíciles en los que se ha enfrentado al programa: la muerte de sus padres.
El valenciano recuerda que acudió a trabajar a pesar de estar roto por dentro. «Cuando murió mi padre, le fui a enterrar y me acordaba de su frase de que un hombre tiene que ser serio con el trabajo, yo no le podía fallar«, recordaba este. Motos asegura que uno de los mayores apoyos aquí fue Alejandro Sanz. «Me salvó, se portó conmigo como un caballero«, apunta.
En este ambiente de confianza con Joaquín el presentador se soltó y habló incluso de los peores invitados que han visitado El hormiguero.
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