Si estás en búsqueda activa de trabajo esto te interesa, y es que a la hora de hacer una entrevista de trabajo es muy importante saber qué y cómo decir las cosas, ya que nos jugamos mucho en muy poco tiempo.
En declaraciones a la Revista Vogue, la entrenadora laboral Mayte García Caneiro habla sobre la importancia de conocer bien la empresa y la oferta para la que nos entrevistan: “una vez hayas entendido exactamente lo que la empresa está buscando, deberías adaptar tu discurso, tu argumentario, tu exposición frente al entrevistador, a eso que solicitan, al igual que se hace cada vez más con el currículum vitae”.
Pero no es el entrevistado el único que debe poner atención a lo que contesta. El entrevistador también debe ser cuidadoso con las preguntas que te hace, sobre todo si eres mujer. Y es que hacer algunas preguntas puede llegar a ser incluso ilegal.
La primera de ellas es la que tiene que ver con tu estado civil e incluso preguntar sobre tus inclinaciones sexuales. Y es que tal y como explica a 20Minutos Teresa Alonso, directora de recursos humanos de la compañía multinacional OmnicomPRGroup, «prácticamente todas las preguntas que tengan que ver con la vida privada y/o personal de las personas, deberían estar prohibidas. Y, además, deberíamos negarnos a contestarlas«.
La edad es otra de ellas. Laura Palomares, directora y psicóloga de Avance Psicólogos, propone en el mismo medio una forma de salir airosa: «explicar con una sonrisa nuestros puntos fuertes. Si eres joven apelar a la actitud entusiasta y disposición, y si se es mayor a la experiencia del que se beneficiaría el puesto».
Palomares habla también sobre aquellas preguntas que tiene que ver con nuestros hábitos sobre el consumo de tabaco y alcohol: «Es posible que estas preguntas se deban a prejuicios sobre el consumo y la posible relación con la salud física y mental, pero obviamente pueden discriminar injustamente ya que la capacidad profesional, la ética profesional o la estabilidad emocional no puede medirse por estos baremos». Tampoco debemos permitir que nos pregunten si estamos embarazadas o sobre nuestra intención de tener hijos.
El abogado laboral Tirso Gracia explica en businessinsider.es que a veces estas preguntas están hechas para molestar al entrevistado, y comprobar cómo reacciona ante situaciones agresivas. «No hay preguntas incómodas sino respuestas imprudentes. En una entrevista de trabajo, la clave está siempre en la respuesta que se da, y no en la pregunta«, explica.