El periodista le preguntaba cómo empezó todo y el cantante confesó haber sufrido un ataque de pánico: «De repente me dio un ataque de pánico y me caí al suelo. Concerté una cita con un psiquiatra y fui. Desde entonces estoy aprendiendo a gestionar una serie de cosas que antes no sabía.»
Uno de los temas que más han preocupado a Dani Martín a lo largo de su trayectoria ha sido el qué pensaría la gente tanto de él como de su trabajo. «Me encuentro en uno de los momento mas felices de mi vida comparado con lo que he vivido hasta ahora». El cantante confesaba toda la presión a la que estaba sometido: «Todo el rato exigiéndome, preocupado, pensando qué piensan mis compañeros músicos de mi…En vez de permitirme ser yo y disfrutar de lo que tengo.»
A día de hoy el intérprete de No, no vuelve, ha aprendido a relajarse y no auto exigirse «caer bien todo el rato«. De hecho, confiesa cómo actúa cuando sale a correr, que es uno de sus momentos más privados: «Cuando salgo a correr si alguien me dice que me pare a hacerme una foto le hago ver que es mi momento. No es necesario alquilar una pista de un polideportivo para ti solo para poder correr y no quedar mal con la gente.»
En relación a su popularidad el cantante ha confesado cómo se siente respecto a esto diciendo: «Yo no estoy viviendo el éxito, yo ya no estoy de moda. Que te siga yendo bien sin estar de moda, creo que es maravilloso. Mi dibujito sería que la gente ya me saluda de lejos».
Para Dani Martín ir al psicólogo también le ha servido para mejorar la relación con sus padres. Este verano lo ha pasado junto a ellos y ha confesado no haber discutido ni una vez. El cantante explicaba que esto es debido a que llevaba 4 meses hablando con su psicólogo sobre «una serie de cosas que generaban dolor» dentro de él. El madrileño aseguraba que no sabía gestionar el duelo de su hermana, el éxito y la relación con sus padres por rencores «guardados de la infancia«.
En palabras del artista ir al psicólogo «es un paraíso«. Un lugar donde poder ser él mismo, sin seducir y donde acude a aprender. Aún así tiene otras claves para estar feliz y tranquilo. Entre ellas, ha asegurado que le viene bien la rutina, comer bien, dormir bien y sobre todo el deporte.
Además, ha explicado que esta rutina consiste en hacer boxeo los martes y jueves; los miércoles se sube a la montaña o corre y los sábados juega al futbol con sus amigos. Las giras no son excusa para Dani ya que ha confesado que se lleva a su profesor de boxeo. Una hora antes de salir al escenario hace 40 minutos de boxeo en el camerino, se ducha y calienta junto a su banda la voz media hora. En ese momento es cuando el cantante afirma: «salgo como la seda y feliz«.
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