Sabías que…
La tasa metabólica basal (TMB) es la cantidad mínima de energía que necesita nuestro cuerpo para sobrevivir realizando las funciones básicas, tales como respirar, hacer la digestión, pensar, filtrar la sangre, regular la temperatura del cuerpo o sintetizar hormonas.
En declaraciones a Uppers, la influencer y nutricionista Paloma Quintana desmonta algunos mitos sobre la pérdida de grasa, además de hacer algunas aclaraciones al respecto.
Siempre que queremos perder peso nos aconsejan hacer cinco comidas al día, algo que según nos explica la experta, no es fundamental y nos puede inducir a error, » nos da igual cuántas veces comas, la base de todo es incluir alimentos de calidad y, a partir de ahí, estudiamos la distribución de esa comida, pero no es el primer eslabón a la hora de querer mejorar nuestro patrón dietético».
Otro de los mitos sobre las dietas es que hay que comer sin grasa. Parece que esto sea lo único importante y lo demás es secundario.
De hecho los alimentos bajos en materia grasa no siempre son sinónimo de saludables estas palabras no son sinónimos de que un alimento sea saludable.
«sabemos que comer con una dieta muy, muy, muy elevada en grasa, sea del tipo que sea, no es recomendable, debemos analizar que no todas las grasas son iguales. Comer sin nada de grasa es casi imposible y tampoco es bueno, ya que la grasa es vehículo de nutrientes importantísimos como la famosa vitamina D o la E«.
“La grasa es un componente de nuestra dieta que debe de estar ahí y, además, es saludable que lo esté», concluye la nutricionista.
Cuando pensamos en adelgazar, nos pesamos compulsivamente para ver si una semana hemos ganado o perdido peso. Pues bien, esa mentalidad está totalmente obsoleta tal y cómo afirma la nutricionista «El peso ideal no existe. Es uno de los conceptos que más nos cuesta desbancar a los expertos. Incluso en personas que llevan mucho tiempo con nosotros y llegan a entender mucho la relación con la alimentación saludable y con muy buenos hábitos, es algo que siguen teniendo en mente, que siguen preguntando, y realmente no hay una respuesta para eso».
El número que aparece en la báscula no es representativo, de hecho hay personas que tienen un IMC normal pero su nivel de grasa es tan elevado que se incluyen dentro de los parámetros de la obesidad.
Por eso «Es más importante fijarnos en baremos relacionados con los porcentajes de grasa, de músculo… hacer un balance solo fijándonos en el peso es muy complicado.”
Son muchos los que quieren pesar lo mismo que cuando tenían veinte años y según explica la nutricionista en Uppers «El cuerpo podría llegar a tener ese peso, pero por cuestiones fisiológicas y del propio desempeño de la vida, suele costar. Primero por la propia evolución del día a día y el trabajo, que nos lleva a movernos cada vez menos. Después entra en juego el tema de la morfología, de la composición corporal. El cuerpo va cambiando y, aunque pesemos lo mismo, la distribución suele ser diferente».
MÁS SOBRE: