Metatarsalgia, la afección crónica que sufre la reina Letizia

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El próximo 15 de septiembre doña Letizia cumple 50 años. Por este motivo son varios los medios que han elaborado reportajes para repasar su trayectoria y su labor como reina desde hace ya ocho años. Así, mientras este verano se confirmaba un documental por parte de Telecinco, estos días El País Semanal ha publicado un reportaje sobre Letizia.

En este, dan a conocer algunos detalles que hasta ahora no se sabían sobre la monarca. Hablamos, por ejemplo, de la enfermedad crónica que sufre esta y que le impide el uso frecuente de tacones.

La hemos visto luciendo todo tipo de zapatos con tacón a lo largo de los años, e incluso hemos llegado a pensar que esta era una amante de los mismos. No obstante, nada más lejos de la realidad. No es que estos le gusten o le dejen de gustar, sino que los «aborrece».

La afección que sufre doña Letizia desde hace años

Letizia sufre desde hace años metatarsalgia, una afección crónica que produce dolor en la plata del pie y que en gran parte de los casos se produce por un uso excesivo de zapatos de tacón. La presión excesiva en la cabeza de los metatarsianos es lo que produce la inflamación en la zona y el dolor al apoyar el pie en cada paso.

Si esta dolencia no se trata puede derivar los dolores a otros puntos del cuerpo como las rodillas o las caderas, incluso llegar a necesitar cirugía.

Sorprende lo bien que Letizia se maneja con este tipo de calzados, a pesar de la afección que sufre. No obstante, la reina tiene sus trucos. Conocer este detalle de su salud explica la adaptación que esta hace de muchos de sus stilettos (zapatos de tacón de aguja altos), a los que desde hace tiempo añade una pequeña plataforma que ayuda a reducir el daño que pueden causar en su cuerpo.

Con esto muchos han entendido también que este verano durante sus vacaciones hayamos visto a doña Letizia optar por calzado cómodo y plano, dejando descansar el pie el máximo tiempo posible. Esto es parte del tratamiento de alguien que sufre metatarsalgia, usar zapatos cómodos y dejar descansar los pies.