El ex cincuenta por ciento de El último de la Fila ha decidido exponer sus cuadros en una muestra que permanecerá abierta en Málaga hasta el próximo 30 de enero.
60 obras escultóricas y pictóricas del intérprete de Pájaros de Barro se exponen en La Finca El Portón de Alhaurín de la Torre, Málaga.
Antes de consagrar su vida a la música Manolo García se dedicaba a la ilustración. Una vocación que nunca abandonó y que ha sabido compaginar de forma privada con su faceta discográfica tanto al frente de El último de la fila como posteriormente en solitario.
Como un padre con sus hijos, Manolo García no puede elegir. La música es una necesidad, lo mismo que la pintura es un hambre que debe saciar.
La muestra está organizada por Eme de Mar Cultura en colaboración con el ayuntamiento de la localidad malagueña y se inauguró el pasado 3 de diciembre.
En declaraciones recogidas por el diario Expansión, Manolo García confiesa que con «Cuerpos Celestes» pretende desligarse de la tecnología para no alejarnos de nuestra esencia: «Pinto animales, montañas, masas líquidas y formas vegetales abstractas, dentro de mis obras oníricas, porque persigo con encono esa esencia, la que no me ofrece mi moderna forma de vivir»
No es la primera vez que las obras del músico salen a la luz públicamente. Ha sido protagonista de más de 20 exposiciones en nuestro país desde que su primera vez en Menorca en 1992.
«Tal y como fusiono, escribo y ligo instrumentos en la música lo hago en la pintura. Soy bastante barroco y rococó. Recargo los cuadros. Del título de un cuadro se me ocurre una canción y cojo la guitarra. Con la pintura me mancho entero, a veces pinto con los dedos. Tengo la suerte de pasarme días y mañanas enteras porque las horas me pasan muy deprisa creando», explica.