Según asegura la NASA, las perseidas, o lágrimas de San Lorenzo, son una de las mejores oportunidades para ver una lluvia de estrellas. Un auténtico espectáculo, relativamente sencillo de observar, que ilumina el cielo con movimientos rápidos y brillantes. Te explicamos todos los detalles sobre este fenómeno natural veraniego.
¿Qué son las Perseidas?
Según los expertos, su origen se encuentra en la estela que va dejando el cometa 109P/Swift-Tuttle, identificado por primera vez en 1862. Este cometa gira en torno al Sol dejando un rastro de partículas de polvo que atraviesan la atmósfera a unos 210.000 kilómetros por hora.
La observación nos ha permitido identificar el punto desde el que parecen radiar las partículas que observamos, que se encuentra muy próximo a la constelación de Perseo. Y precisamente por eso reciben el nombre de Perseidas.
La tradición las ha bautizado como lágrimas de San Lorenzo debido a una casualidad: el punto álgido de este fenómeno atmosférico suele coincidir con el 10 de agosto, festividad de San Lorenzo, que según la tradición fue martirizado en una parrilla y «cuyas lágrimas se ven desde el cielo».
¿Cuándo podemos ver las Perseidas?
Según datos oficiales de la NASA, esta lluvia de estrellas puede estar compuesta por 50 y hasta 100 meteoritos a la hora y son mucho más visibles al ojo humano en la noches despejadas de verano.
El rastro de materiales y polvo que deja el cometa a su paso es muy abundante y este año se encuentra en plena actividad desde el 17 de julio hasta el 24 de agosto.
Su momento más visible será las noches del 11, 12 y 13 de agosto de 2022 y aunque el fenómeno se produce a lo largo de todo el día es mucho más visibles de noche y en ubicaciones con baja contaminación lumínica.
En España, y dado que son un fenómeno global, se observarán desde cualquiera parte de nuestra geografía. Eso si, te recomendamos esperar a que se haga completamente de noche para que sean mucho más visibles y puedas disfrutar de todos sus matices.
¿Cómo ver las Perseidas?
Su visibilidad es mayor en pequeñas poblaciones o en lugares de campo o montaña, siempre y cuando la contaminación lumínica sea mínima. Aunque la lluvia de estrellas es visible desde los dos hemisferios, en el norte es algo más fácil de observar que en el sur.
Así que ya sabes, busca un lugar alto, despejado y sin apenas luminosidad y ponte cómodo. Ubica la constelación de Perseo buscando un grupo de estrellas que formen una silueta humana con el brazo extendido y disfruta de las vistas. Y un último consejo consejo: sitúate de espaldas a la Luna…
Se trata sin duda, de un increíble fenómeno natural que nuestro cielo nocturno nos regala cada verano para compartir en compañía.
