Si una ruptura con hijos ya es difícil de por sí, cuando se trata de dos personas públicas la situación se vuelve harto más complicada si cabe. Uno de los casos más recientes es el de Laura Escanes y Risto Mejide, los cuales decidieron romper su matrimonio tras siete años de relación y una hija en común, Roma.
La pequeña, de tres años de edad, es la mayor alegría de sus vidas. Recientemente la influencer se ha mostrado muy preocupada por cómo le pueda afectar toda esta situación a su hija. Así lo ha manifestado en su nuevo podcast, Entre el cielo y las nubes.
Laura Escanes se dirige a su hija: «No hay día que me pregunte si serás feliz»
Ya en el primer episodio del mismo Escanesconfesaba una conversación que tuvo con su hija y en la que esta le decía lo siguiente: «¿Cuándo vas a dormir con papi y conmigo? Que te queremos mucho«. En el nuevo episodio la influencer contó con el neuropsicólogo Álvaro Bilbao como invitado. Este tiene sus redes enfocadas en la paternidad y el comportamiento infantil, y nuevamente Laura Escanes ha hecho referencia a su experiencia como madre separada.
Lo ha hecho con una bonita carta a su hija Roma que dice así:
«Pequeña Roma:
No hay día que no me hagas sonreír. Solo con el hecho de pensar que estás en mi vida lo consigues. Llegaste a nuestra vida para hacerla mejor, no lo dudes nunca. Pero también tengo miedos, y no hay día que no piense en todas esas cosas que no he sabido darte o que no he hecho bien. No hay día que me pregunte si serás feliz y recordarás tu infancia como una etapa bonita de tu vida.
Escucharás muchas cosas sobre papá y mamá, demasiadas. Por eso cada vez que tengo la oportunidad de decirte o escribirte no me lo pienso, no sé si para callar bocas, para convencerme a mí o para convencerte a ti a pesar de todo lo que puedan decir o creer. Por eso, un poco de este cielo es tuyo.
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Cuando me siento en el cielo es por ti. Me haces volar y ver la vida desde otras perspectivas que no habría imaginado. Y ver la vida desde aquí arriba, dejándote volar, es más bonito si cabe. Digo dejarte volar porque confío en ti. Porque eres valiente, capaz, sensible, fuerte. Que nadie te haga dudar de tu fuerza. T’estimo fins a la lluna».