El momento del baño para un perro puede ser de relax o diversión. Sin embargo, para otros muchos puede llegar a ser algo muy estresante.
Puede deberse a estar quietos durante mucho tiempo en un mismo sitio, el propio sonido del agua saliendo de la alcachofa de la ducha o simplemente que no aguanten como cae el agua sobre ellos.
Todo esto puede significar que la hora del baño sea para sus dueños una auténtica tragedia. Para su agrado, a día de hoy hay muchos consejos para facilitar ese rato de limpieza.
Trucos que te ayudarán a bañar a tu perro
Para empezar, hay que dar a tu perro un buen cepillado para eliminar el pelo muerto y los nudos. Después, mételo en la bañera con el agua más o menos tibia y mójale con el cabezal de la ducha.
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Después, uno de los trucos que se hacen en las peluquerías caninas son los adhesivos para premios. Estos son ventosas hechas para poner al alcance del perro en los azulejos de la bañera. Mientras los estés lavando, pueden chupar los juguetes, con lo cual, verán este momento como algo positivo.
Además, se sentirá confiado y puede añadir a estos adhesivos la crema de cacahuete casera, «es más saludable que la que compras en las tiendas, que contiene azúcares, no recomendados para los perretes», explica Lorena García, técnica en peluquería y estética canina y felina.
Haciendo referencia a su miedo a la alcachofa de la ducha, la experta explica que «con los perros pasa un poco como con los bebés, si evitas la alcachofa y utilizas algo para echarles agua encima, poco a poco, les relajará y evitará que se asusten o se estresen».
Otro de los consejos que hay es bañar al animal entre dos personas. Una de ellas se dedicaría a limpiar al animal mientras que la otra se asegura de que esté tranquilo y distraído. «Dos personas pueden generar un ambiente más relajado para el perro y crear en él un recuerdo positivo del baño», comenta García.
En cualquiera de los casos, la experta recomienda que se eduque al animal con este tipo de trucos y refuerzos para evitar problemas futuros. «Si desde cachorro se acostumbra al agua, al sonido de la alcachofa y al momento del baño, en general, no tendrá problemas de estrés cuando crezca».
