Y es que tal y cómo explica el dermatólogo Carlos Morales Raya a la revista Glamour, “El cuero cabelludo no deja de ser piel, aunque con un mayor número de glándulas sebáceas y folículos terminales en lugar de folículos vellosos”
Y por eso precisamente cóm el resto de la piel necesita cuidados específicos, si tu cuero cabelludo está sano, tu cabello también lo estará, además de fuerte y ser capaz de regular la producción de sebo.
El siguiente paso es, igual que con nuestra piel, ver qué tipo de cuero cabelludo tenemos y qué necesidades tiene este y a partir de ahí ofrecer una rutina de cosméticos adecuada que nos ayude a que funcione bien y no acumule células muertas y contaminación o exceso de sebo.
En este sentido tratamientos cómo la mesoterapia pueden ir muy bien, tal y cómo explica el experto, estos tratamientos “estimulan el ciclo folicular, favoreciendo la formación de un pelo más denso y más grueso, a la par que reparan y estimulan la diferenciación folicular para evitar la pérdida capilar en determinados tipos de alopecia”.
Además hay algunos gestos simples que te ayudarán a cuidar tu cuero cabelludo:
No olvides que el cuero cabelludo cumple varias funciones: de barrera física, protección inmunológica y aislante térmico entre otras y por eso es importante cuidarlo.
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