Está clara la importancia de practicar en nuestra rutina si puede ser a diario algo de deporte. En sus directrices sobre actividad física y comportamiento sedentario la OMS expone que cualquier persona de cualquier edad y capacidad puede ser físicamente activo, al tiempo que afirma que si la población mundial fuera más activa se podrían evitar cinco millones de muertes al año.
El consejo de la Organización es dedicar en adultos entre 150 y 300 minutos a la actividad aeróbica de moderada a vigorosa cada semana, esto incluye a personas con enfermedades crónicas y discapacidad y 60 minutos de media al día en el caso de niños y adolescentes.
Pero además parece que hay unas horas mejores que otras a la hora de practicarlo, sobretodo si nuestro objetivo es adelgazar. Esto es al menos lo que se deduce de un estudio realizado por un grupo de investigadores neerlandeses y publicado en la revista Diabetologia, del que se hace eco niusdiario.es.
El mismo se realizó con un grupo de voluntarios entre 45 y 65 años de edad, a los que se clasificó por las horas en las que realizaban ejercico físico en tres franjas, mañana de seis ya doce de la mañana, tarde de doce a seis de la tarde y noche de seis de la tarde a doce de la noche.
Tal y como explican desde niusdiario.es, » El resultado principal mostró que la resistencia a la insulina se reducía a medida que el ejercicio se realizaba por la tarde (un 18%) o por la noche (un 25%), lo que supone un beneficio mayor que permite, por ejemplo, reducir el riesgo de desarrollar una diabetes de tipo 2.». Por lo que del estudio se deduce que las horas a las que practicamos deporte influyen más que el tiempo y el número de veces que empleamos al día en hacerlo.
Es decir «Hacer deporte entre moderado e intenso entre las 18:00 y la medianoche incrementa un 25% los beneficios a la hora de procesar el azúcar». Algo de lo que ya hablaron, tal y como explicaba Yodona allá por el mes de junio, los científicos del Instituto de Ciencia Weizmann de Israel , de cuyos estudios también se deducía que «el mejor momento para hacer deporte es al caer la tarde y en las primeras horas de la noche «, aunque aducían razones diferentes, «En su opinión, es cuando la actividad física resulta más eficiente, porque el consumo de oxígeno es menor, tenemos más fuerza y resistencia y la temperatura corporal es algo más elevada, lo que hace que el cuerpo queme más calorías.»
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