Ser inteligente va mucho más allá del coeficiente de inteligencia. De hecho hay una serie de rasgos que comparten las personas inteligentes. Normalmente asociamos inteligencia con personas que resuelven ecuaciones en su cabeza muy rápidamente o tienen un coeficiente intelectual muy alto. Sin embargo ninguna de las dos cosas son imprescindibles para ser muy inteligente.
Y es que según explican los expertos la cosa va mucho más allá y la gran mayoría de las personas ni siquiera se dan cuenta de lo inteligentes que son.
Tal y como recoge el diario La Razón, la Doctora en psicología clínica, Catherine Jackson explica que «Una persona inteligente es aquella que es flexible en su forma de pensar y puede adaptarse a los cambios, piensa antes de hablar o actuar, y es capaz de manejar sus emociones de manera efectiva”.
¿Sabías que…
La capacidad de adaptación es una de las cualidades más destacadas de las personas inteligentes. La flexibilidad para enfrentarse a distintas situaciones las hace diferentes. La inteligencia depende de nuestra capacidad para modificar nuestro comportamiento con el objetivo de poder adaptarnos de manera más eficiente a los cambios de nuestro entorno.
Características de la gente inteligente
Hay una serie de características que parecen comunes en las personas inteligentes. Toma nota:
Un estudio de 2016 publicado en el “British Journal of Psychology” concluyó que las personas con altas capacidades intelectuales prefieren estar solas. Según la psicología evolutiva, las personas evolucionaron para ser inteligentes para resolver problemas complejos. Por tanto, aquellos que son más felices estando solos, son más inteligentes porque saben enfrentarse a los desafíos solos, sin ayuda. Aunque no es excluyente, puedes ser sociable e inteligente.
Otra de las características que comparten son la empatía, que forma parte de la inteligencia emocional, y la comprensión, que forma parte de la inteligencia cognitiva, y por eso inteligencia y empatía están directamente vinculadas.
Además suelen ser observadores y curiosos, a las personas inteligentes les gusta aprender de otras personas y culturas, tienen curiosidad por aprender. Además son observadores, ya que tal y cómo recoge el mismo diario, «cuando se tiene la capacidad de asimilar todo, se pueden ver cosas que otros no ven».
Además saben controlarse y tienen buena memoria, y es que tener autocontrol denota madurez y es un signo de inteligencia porque probablemente va unido a pensar antes de hablar o actuar. Cuando se tienen habilidades de funcionamiento ejecutivo, se tiene buena memoria a corto plazo y una gran capacidad para concentrarse y prestar atención.
Son flexibles, apasionados, buenos conversadores y líderes en los que se puede confiar. Suelen ser de mente abierta y flexible, con capacidad para adaptarse a otras opiniones.
La psicóloga Holly Schiff, explica respecto a la pasión de las personas inteligentes que exploran su curiosidad. “…están dispuestos a aprender lo que no saben”, y añade: “Su curiosidad intelectual se prestará a querer autoeducarse y leer todo lo que esté a su alcance”.
Les gusta conversar porque «reconocen que los demás tienen información y conocimientos que, a través de una conversación compartida, los ayudarán a crecer, expandir su sabiduría y mejorar su intelecto”, explica la antropóloga corporativa Andi Simon, que también explica por qué son buenos líderes, “a la gente le gusta seguir a personas inteligentes que han desarrollado las habilidades necesarias para dividir los trabajos en componentes comprensibles, motivarlos a trabajar hacia un objetivo común y celebrar los resultados para que mantengan el impulso del equipo”.
