Francisco se divorció hace cinco años de la que era su mujer desde hace casi 40 años. La ruptura fue porque ella no estaba enamorada de él, y reconoció que nunca lo había estado antes. Tienen dos hijos en común, uno de 28 y otro de 32, y la relación entre ambos empezó cuando ella tuvo que rehacer su vida cuando sus padres no aprobaban la relación que tenía con otro chico. A Francisco le tenía cariño, pero nunca hubo amor. Él sigue hoy por hoy enamorado de ella. Ahora no tienen ningún contacto y sus hijos son lo suficientemente mayores como para no tener que haber contacto.