“Primer concurso de karaoke” así llamaba Cunillera a la reunión de amigos de la que subía alguna foto a su Instagram, donde mostraba uno de los tres modelos que lució durante la noche, concretamente uno que imitaba al icónico vestido verde de Versace que López lució en los Grammy del año 2000.
Después lució un modelo plateado con brillos que llevó con plataformas y, por último, algo más casual, una sudadera con mallas y calentadores, un look que la cantante suele lucir para sus salidas por la ciudad para pasear a su mascota o ir a comprar.
Xavi, por su parte, escogió un look bastante más sencillo, una camisa con botones abiertos que dejaba su pecho al descubierto, con un montón de collares y tatuajes. Un estilismo que completó con las características gafas de sol del cantante.
No es la primera vez que el exjugador saca su lado más divertido disfrazándose, algo que ha hecho incluso con sus niños en alguna ocasión. Esta vez acompañaban a la pareja algunos amigos como David Prats, cuya amistad con Xavi viene nada más y nada menos que de los infantiles del Barça, así como Toni Lobo, que es de su misma quinta. Ambos fueron acompañados también por sus parejas.
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