El plátano es una de las frutas que más gusta. No sabemos siempre distinguir un plátano de una banana. Ambas frutas se pueden llevar fácilmente en el bolso o en la mochila de merienda y suelen gustar mucho por su dulce sabor. Pero no son iguales. Te damos unos consejos clave para que desde ahora sepas qué es un plátano y qué es una banana cuándo los veas en los supermercados. Se pueden diferencias por su tamaño y aspecto. El plátano suele ser más pequeño y con una curva mientras que la banana es más larga y carece de curva, es recta.
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Los plátanos según van madurando presentan motas negras en su cáscara. Por dentro, la banana tiene un color más blanco mientras que el plátano es algo más amarillo.
El plátano es una fruta de Canarias mientras que las bananas vienen de países tropicales productores como Ecuador, Costa de Marfil, Colombia y Costa Rica.
— Plátano de Canarias 🍌 (@platanosiempre) May 26, 2022
El plátano tienen un sabor dulce, una textura blanda. Por si fuera poco acumula gran vantidad de vitaminas, fibra y minerales como potasio. Su competidora, la banana tiene un sabor menos dulce y la textura es más harinosa o aspera. La diferencia de texturas es consecuencia de que la fruta canaria tiene mayor humedad, lo que hace que sea más agradable de comer aunque sobre gustos ya se sabe.
La fruta de Canarias tiene alto contenido en vitamina B, alrededor del 30 por ciento de la cantidad recomendada, según un informe de Asprocan (Organismo gestor del plátano de Canarias).
La banana tiene más calcio, alrededor de 5 miligramos por cada 100. El calcio juega un papel importante en el desarrollo de huesos y dientes.
El precio de la banana suele ser algo inferior al del plátano. Fácilmente se puede comprobar en la frutería antes de adquirirlo si es que no tienes una clara predilección por alguno de ellos.
El plátano es más saciante, aunque sea algo más pequeño. Esto es consecuencia de la cantidad de pectina que tiene, una fibra soluble, que aumenta la sensación de saciedad.
En qué se parecen el plátano y la banana
Ambas frutas provienen de la misma familia: las musáceas. Son frutas ideales para deportistas y cada vez que necesitamos un aporte extra de energía. Todos hemos visto a nadadores y tenistas internacionales tomarse un plátano para reponer fuerzas. Esto es debido a que son una fuente de potasio importante para el correcto funcionamiento de los músculos, según indica la Fundación Española para la Nutrición (FEN).
En el mercado siempre se pueden adquirir porque no tienen una estación concreta. Ambas se pueden tomar durante todo el año.
En cuanto, a las calorías, apenas hay diferencias entre ambas. Lo que si hay que tener en cuenta es que cuando van madurando, va aumentando el aporte calórico. El primero aportará a la dieta alrededor de 80 kilocalorías por 100 gramos frente a 99 de una banana.
