El pasado 8 de marzo, coincidiendo con el Día de la Mujer, se llevó a cabo en el WiZink Center de Madrid Mujeres cantan a Rocío, el homenaje a Rocío Jurado organizado por la hija de esta, Rocío Carrasco, y su pareja, Fidel Albiac.
Un evento en el que participaron numerosas artistas, entre ellas Pastora Soler, Beatriz Luengo, Ruth Lorenzo, Edurne o Rigoberta Bandini. Se acordó que todos los beneficios obtenidos por dicho concierto irían destinados a la Fundación Ana Bella, que lucha contra la violencia de género.
Según ha revelado el paparazzi y colaborador de Viva la vida, Diego Arrabal, esta intención solidaria ocultaba una «trampa» en el contrato, donde había una cláusula que vendía los derechos de imagen «para la reproducción de esa gala en televisión o DVD«.
Así lo contaba este en su canal de YouTube, donde aseguraba también que este detalle hizo enfadar a algunas de las artistas que actuaban esa noche. Según este, las cantantes de más renombre no se mostraron conforme con esta cláusula, pues si se trataba de un evento solidario nadie debería ganar dinero con ello.
Al parecer sería Telecinco la cadena beneficiaria de la emisión de esta gala, a lo que Arrabal propone que esta done los beneficios obtenidos por publicidad o DVDs en el caso de ponerse a la venta.
Diego Arrabal asegura que las diferencias se solventaron
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Sin explicar muy bien los detalles de cómo se solventaron las diferencias en el acuerdo, Arrabal explicaba que las cantantes que en un principio se mostraban disconformes con el contrato terminaron cediendo para evitar problemas. «Después de estar mucho tiempo negociando, estas personas, que no tenían ganas de problemas, cedieron, pero estuvieron a punto de no subirse al escenario«, confesaba.