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¿De qué manera afectan los días nublados a nuestra salud y ánimo?

Los niveles de vitamina D del organismo son vitales

Llega la primavera y con ella el buen tiempo y días de más luz. Sin embargo, las nubes y la lluvia no desaparecen del todo y termina por afectar tanto a nuestra salud como a nuestro estado de ánimo.

La vitamina D es una hormona que regula el metabolismo y la absorción del fósforo y calcio, por lo que determina también la salud de nuestros huesos.

En España. ha aumentado el número de personas que toman suplementos de vitamina D. Esto tiene que ver con el estilo de vida sedentario adquirido y por pasar menos tiempo al aire libre, y por lo tanto, recibir menos luz solar.

Las nubes afectan a nuestra salud

La luz solar contiene vitamina D que absorbemos. Además, se encuentra ligada a la serotonina, una sustancia que aumenta los niveles de bienestar y de felicidad. Además, no es la única hormona que se ve afectada con la lluvia y los días nublados, pues los cambios de tiempo y la escasez de horas de sol hace que las conexiones neuronales de nuestro cerebro se vean afectadas.

Con ello, se altera la producción de dopamina o noradrenalina, sustancias responsables de nuestro estado de ánimo.

Las fatídicas consecuencias de esta falta de luz son la apatía, tristeza, decaimiento y menos ganas de vida social. También repercute en la actividad y por lo tanto, puede ser un desencadenante a ganar peso.

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Para intentar suplir esa luz solar que necesitamos, hay que aumentar la ingesta de alimentos ricos en la vitamina D. Por ejemplo, las sardinas, arenques, caballa, huevos y lácteos son algunos de los productos ricos en esta hormona.

Además, hay que fomentar la relaciones de amistad y familiares durante este periodo. Hay que hacer un esfuerzo extra para llevar una vida activa. Por ello, practicar deporte es esencial para mantenernos alegres.

La dopamina que liberas después de hacer ejercicio hará que se mejore el humor y desaparezca la sensación de tristeza que puede haber.

Sobre todo, hay que tener paciencia en este cambio de estación, pues después de la tormenta siempre llega la calma. La salud y la primavera van más que nunca de la mano.