Si eres de los que «tiras» a menudo de latas de conserva a la hora de pensar en tus menús, esto te interesa ya que hoy hablamos de cuales son las más sanas. Lo hacemos al hilo de un artículo publicado en 20Minutos en el que Francisco Botella, de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, explica como distinguir una conserva de buena calidad de otra que no lo es tanto. Te damos las claves para elegir las conservas más saludables.
Y es que ante la pregunta de si las latas son recomendables nutricionalmene los expertos responden que depende del tipo de conserva del que hablemos y de los ingredientes añadidos que lleve.
Aunque por regla general los alimentos frescos son más saludables no todas las conservas tienen por qué no serlo. El experto da las claves para distinguir una lata de conserva sana de otra que no lo es.
Esto es en lo que debemos fijarnos al comprar conservas
El experto habla de frutas, legumbres y pescado en conserva. Respecto a la primera, la fruta, advierte que ,«Suele ser un producto cocido porque, si no, se pudriría. Si cueces una fruta, todas las vitaminas que son termolábiles, que se destruyen con el calor, se pierden». Por lo tanto no es lo mismo comer una fruta fresca que una en conserva. Aunque matiza que entre no comerla o comerla en conserva en general es mejor consumirla en lata, aunque fijándonos siempre en los ingredientes añadidos, «Si la fruta es en almíbar o al natural sin azúcar, la diferencia es muy grande».
Respecto a la cantidad de azúcar que contiene este tipo de producto, desde ABC Salud explican que también, «es algo que debe revisarse, especialmente en las conservas que contienen salsas…es recomendable que sea bajo en azúcar y eso implicaría que debe contener menos de 5 gramos por cada 100 gramos.»
Respecto a las legumbres Serrano explica que pueden ser grandes aliadas en una dieta saludable por su contenido en fibra y proteínas. En conserva pueden sacarnos de un apuro, pero es importante mirar qué tipo de conservantes utilizan, «Algunas marcas conservan con cloruro cálcico, que está muy bien. Pero otras utilizan cloruro sódico, que será peor», la razón es que este conservante es salino, por eso debemos lavarlas muy bien antes de consumirlas.
Y es que es importante fijarnos en la cantidad de sal que contiene la conserva, tal y como apuntan desde ABC Salud, «es aconsejable elegir aquellas con bajo contenido en sal. Así, se considera que una conserva tiene un bajo contenido de sal si no aporta más de 0,3 gramos de sal, aunque en general lo que recomiendan los dietistas-nutricionistas para que sirva como referencia es que su aporte de sal no sea superior a 1 gramos de sal (o 0,5 gramos de sodio) por cada 100 gramos de producto».
Y respecto al pescado en conserva, la opinión del experto es tajante, «La conserva óptima de pescado sería en aceite de oliva virgen extra y bajo en sal». Y es que todo aquello «que contenga aceites de otro tipo o salsas, como la de tomate o americana, tendrá peores grasas e ingredientes menos saludables.».
En cuanto a los tipos de envases más recomendables desde el punto de vista de seguridad alimentaria, desde ABC Salud explican que, «tanto los envases de cristal como las latas son seguros para su consumo, según recogen documentos recientes de la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria). En la actualidad, no obstante, se encuentra en estudio la posibilidad de que el bisfenol A (BPA), una sustancia química que se usa para recubrir las latas y otros tipos de envases pueda tener un efecto nocivo para la salud.»
