Sin embargo tal y como está el coste de la vida y con el nivel de inflación al que nos enfrentamos, una buena idea es adelantar las compras navideñas, algo que nos va a permitir ahorrar una buena cantidad de dinero si lo hacemos con la suficiente previsión.
Algunos productos duplican su precio durante las fechas navideñas, de ahí la importancia de adquirirlos antes. Y es que tal y como explican desde El Heraldo, «Según concluye un estudio que realizó la OCU el año pasado comparando la evolución de precios desde noviembre hasta finales de diciembre, algunos alimentos subieron más del 50%.En concreto, los percebes gallegos pasaron de 50,55 euros a 89,38 (un 77% más) y la merluza al corte de 13,04 euros a 20,60 (un 58% más).».
Respecto a qué productos adquirir con tiempo, desde 20Minutos apuntan a pescados, mariscos, carnes, ibéricos o ahumados y en el mismo medio el chef Jesús Labrador propietario del grupo de restauración Bebola explica, «En navidades, pescados icónicos como el besugo, la lubina y el rape tienden a doblar su precio, así que comprarlos ahora supone un ahorro significativo».
En cuanto a los langostinos, gambas, cigalas y carabineros Labrador habla de la importancia de congelarlos bien, «La forma es disponer el marisco en tuppers alargados para que no se amontonen unas piezas sobre otras y cubrirlos con agua mineral y en algunos casos se pone una rodaja de limón. Luego simplemente es cerrar el tupper lo más hermético posible y listo. Si se hace este método de congelar el marisco fresco hay que dejarlos en agua hasta el momento de cocinarlos».
Respecto a las carnes como el solomillo, cordero, cochinillo, pulardas y pavo, según el estudio de la OCU antes mencionado «el cordero a cuartos aumentó un 1%, de 18,39 euros a 18,52 y el redondo de ternera un 5%, de 13,66 euros a 14,37», una subida mucho menor que en el caso del pescado y el marisco, de ahí que la gente no adelante tanto su compra.
No obstante el experto explica que se pueden congelar igual que el pescado hasta el día de su consumo, además de recomendar comprar piezas enteras y pedirle al carnicero que nos las prepare como queramos. Los ibéricos y ahumados se pueden “lonchar y envasar al vacío, que hace que el producto se mantenga óptimo hasta la fecha de consumo”, explica.
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