La principal característica de las redes sociales es su instantaneidad. A través de nuestro teléfono podremos estar en contacto con nuestra pareja constantemente. De esta forma mejorará el flujo de comunicación, se potenciará el vínculo entre las dos partes y la intimidad y la complicidad en la pareja se verán fortalecidas. En definitiva, se intensifican todos los beneficios que supone de por sí una buena comunicación en pareja.
Internet ha hecho posible muchas relaciones que de otra forma no habrían sido posibles. Además de permitirnos conocer a gente de cualquier lugar, también nos da la posibilidad de mantener el contacto de forma rápida y sencilla. Ya no es necesario que las dos personas estén en el mismo momento pegadas al teléfono para poder mantener el contacto, cada uno puede responder a los mensajes en el momento que crea conveniente. Por lo tanto, las relaciones a distancia son mucho más viables desde que las redes sociales han llegado a nuestras vidas.
Muchas veces, conocer a la familia o a los amigos de nuestra pareja es motivo de miedos, dudas y nervios. Internet no cambia esta situación, pero sí que puede hacerla un poco más fácil. Quizá gracias a las redes sociales puedas hacerte una idea de cómo son las personas de su entorno e incluso encuentres motivos para romper el hielo cuando coincidáis en persona.
Las redes sociales dan muchos motivos para malinterpretar situaciones y sacar cosas de contexto, y es ahí cuando aparecen los celos. Debemos aprender a distinguir lo real de lo virtual y medir el significado de lo que ocurre tras la pantalla. No podemos alarmarnos por cualquier mensaje, like o comentario que reciba nuestra pareja.
Es importante saber utilizar las nuevas tecnologías en su justa medida. Si abusamos de ellas, pueden suponer una adicción y alejarnos de nuestro entorno, lo cual incluye a nuestra pareja. Es mejor que no dediquéis excesivo tiempo al teléfono mientras estáis juntos para centraros en vuestra compañía. Así pasaréis un tiempo mucho más valioso en pareja.
Ligar por internet está a la orden del día y todos podemos recibir una propuesta indecente en cualquier momento, incluida nuestra pareja. Una infidelidad es mucho más fácil de esconder tras una pantalla.