Su tamaño además las hace muy fáciles de llevar, cuentan con una serie de compartimentos que se apilan y ajustan en vertical y están hechas de aluminio, acero inoxidable, plástico o vidrio. Aunque las más sofisticadas están hechas de materiales térmicos para mantener los alimentos calientes, cómo el bambú, la madera lacada y la melamina.
Y es que en esto de llevar comida los japoneses nos llevan algo de ventaja, ya en el siglo V en Japón los trabajadores del campo llevaban la comida con ellos, sobre todo arroz deshidratado y hacia 1600 aparecieron las cajas de madera lacada para llevar la comida a fiestas y reuniones.
Además es muy importante colocar la comida de manera que quede de forma compacta, es decir, ocupando todo el espacio para evitar que mueva. Se deben separar los alimentos secos de los húmedos y antes de colocarlos en nuestra bento, los alimentos deben estar fríos para que no se genere vapor que los reblandezca.
También deben separarse las preparaciones secas de las húmedas. Y, si el arroz u otros alimentos están aún calientes al meterlos en el bento, deberemos esperar a que se enfríen para cerrarlo, para que no se reblandezca. Las salsas y vinagretas debemos ponerlas aparte y echarlas cuando vayamos a comerlas.
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