Para defender su postura La Comunidad de Madrid aporta datos varios datos que conviene tener en cuenta:
El viernes pasado el Consejero de Sanidad, Enrique Ruíz Escudero, convocaba a los medios en rueda de prensa junto a Elena Andradas (directora general de Salud Pública, ) y Mercedes Navío (coordinadora de la Oficina Regional de Salud Mental y Adicciones). Una rueda de prensa en la que se han pormenorizado todos estos efectos adversos de dicha sustancia en la salud física y mental de las personas.
El consejero alertaba sobre la presencia de niños de 14 años en las urgencias por haber consumido Cannabis y puntualizaba,«… es algo que como sociedad no nos lo podemos permitir. A día de hoy es la droga ilegal más extendida y consumida en el mundo y esto debe obligar a las autoridades sanitarias a poner más empeño en su prevención».
Y es que tal y cómo recoge el Diario 20Minutos, Mercedes Navío aportó las siguientes cifras, «El Servicio Madrileño de Salud (Sermas) realizó 5.384 atenciones en 2021 por consecuencias derivadas del cannabis, de las cuales 4.253 requirieron ingreso hospitalario. De ellas, 242 –con una media de edad de 28 años– se prolongaron más de nueve días y tenían patologías relacionadas con el consumo como diagnóstico principal, mientras que en 4.011 fue secundario. Otros 1.131 pacientes fueron tratados en el ámbito ambulatorio –334 menores–, de los que 270 lo hicieron por abuso de sustancias y 861 por presentar dependencia. «
En cuanto al uso de drogas entre los chavales de la Comunidad de Madrid, la directora general de Salud Pública habló de los datos de la última Encuesta sobre uso de drogas en Enseñanzas Secundarias en España (Estudes), referidas en concreto a la Comunidad de Madrid.
Se trata de una encuesta realizada en chavales entre 14 y 18 años, según la cual «la normalización y accesibilidad de esta droga generaría un aumento del consumo. El 19,4% de los alumnos madrileños manifestó en 2021 que hasta el momento no la había probado, pero que lo haría en caso de que fuera legal. «
Elena Andradas también ha señalado que el año pasado el 20% de las Urgencias por consumo de drogas estuvieron vinculadas al cannabis, lo que supone un incremento un incremento de cuatro puntos respecto a 2020.
Además ha explicado respecto al debate sobre su legalización, «… que es importante diferenciar el alcance centrándolo en el uso terapéutico. Entendemos que el debate sobre la regulación debe circunscribirse al uso medicinal porque supone una actuación sanitaria guiada por la evidencia científica, basada en el tratamiento de patologías muy concretas y bajo prescripción y supervisión facultativa. El debate sobre el uso recreativo no tiene ninguna evidencia científica».
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