La calima nos dejó en marzo estampas idílicas pero genera efectos adversos muy perjudiciales para la salud. Las autoridades sanitarias alertaban de los posibles problemas respiratorios que, derivados de la calima y las sustancias tóxicas que contiene, podrían provocarnos. Ahora se le añaden nuevos efectos: la piel y el correcto funcionamiento del corazón.
Una nueva nube de polvo procedente del Sáhara amenaza con volver a cubrir Andalucía de aire turbio y sofocante. Vendrá acompañada de temperaturas de hasta 40 grados centígrados. Jaén y Granada serán dos de las ciudades más afectadas por este fenómeno climatológico.
Este fenómeno ha empeorado significativamente la calidad del aire, ya que las partículas que siguen en suspensión en el aire resultan contaminantes para la salud. La contaminación generada por este fenómeno meteorológico no solo afecta a los pulmones, puesto que la irritación generada en este órgano se expande rápidamente al resto del organismo, según ha explicado Julián Pérez-Villacastín, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC) en una pequeña entrevista a Nius.
Para intentar reducir el impacto de la calima, que todavía sigue vigente es recomendable utilizar constantemente mascarilla y evitar practicar deporte al aire libre. No hay que olvidar que los niveles de contaminación son bastante altos.
Otro dato que a lo mejor no sabías es que la calima también puede afectar a tu cutis y más, si durante estos días te has visto expuesto con frecuencia a este ambiente. Esta parte del cuerpo es muy sensible y es una de las que más en contacto está con el aire, lo que influye en el estado de tu rostro.
La piel es susceptible a cualquier cambio y en esta ocasión no iba a ser menos. Las consecuencias que puede generar la calima en tu piel son irritación, mayor sensibilidad y sequedad y deshidratación.
Las pieles grasas también verán alterado su rostro y es que se encontrarán con una mayor producción de sebo, como un efecto adverso de las partículas contaminantes de la calima.
Uno de los aspectos más importantes es hacer una buena limpieza de la piel al llegar a casa. La limpieza tendrá que realizarse de forma exhaustiva, ya sea con leche hidrante y tónico o con algún fresco que elimine las impurezas de tu rostro.
También es altamente recomendable mantener tu cutis bien hidratado y así, evitar la posible sequedad y tirantez que este fenómeno meteorológico puede causarte. Todos estos cuidados faciales deberán ir acompañados de una buena hidratación interna, es decir, de beber mucha agua porque el ambiente es mucho más reseco de lo habitual.
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