La luna está siempre rodeada de cierto misterio y admiración. El satélite de la Tierra influye en las mareas, en el ciclo menstrual de las mujeres, en la fecundidad, el crecimiento del pelo y en las cosechas. El ánimo se puede ver modificado según la luna esté en una fase u otra. Su influjo afecta a muchas facetas de nuestras vidas. Lo cierto es que miramos al cielo, la luna nos atrae con un poder tan incuestionable como inexplicable.
La ciencia ha descubierto que la luna influye en nuestra manera de conciliar el sueño. Las fases de la luna tienen mucho que ver en como dormimos, según un estudio de la Universidad de Uppasala (Suecia). Dormir bien es una necesidad y nuestro día a día se puede ver condicionado si pasamos una mala noche. Por eso, si sabemos como nos altera la luna en nuestro sueño, podremos hacer algo para mejorar la calidad del sueño.
La fase denominada luna nueva dura aproximadamente tres días. Tradicionalmente esta luna es la que marca el inicio de algo y es cuando podemos aprovechar para cambiar las cosas que no nos gustan por otras que sí. En este momento, la luna está entre la Tierra y el Sol, en línea recta visualmente. No emite luz y es cuando vemos la luna totalmente oscura. Gracias a esa oscuridad las personas suelen dormir mejor.
Comienza a dar algo más de luz durante esta fase. Pueden comenzar los problemas para conciliar el sueño. Según el estudio de la universidad sueca, la duración del sueño de las personas sometidas al experimento, fue más corta en estas noches. Si se compara con el período menguante fue menor también.
La llena nos hace admirarla. «El ciclo lunar parece influir en el sueño humano», según el investigador Christian Cajochen, autor de un estudio de la Universidad de de Basilea (Suiza). «Incluso cuando uno no ve la Luna y no está al tanto de la fase lunar actual».
La veamos o no ahí está actuando sobre todos nosotros queramos o no. En esta fase lunar es más probable que el sueño se vea interrumpido. La luna llena da origen a muchas «locuras» y a momentos de euforia en las que muchos se pueden sentir «lunáticos». La Policía siempre ha atribuido a esta fase el alza de los incidentes como asesinatos, suicidios y otros altercados, según un informe del cuerpo policial de Reino Unido. Hay más casos de sonambulismo en estos días y tradicionalmente se cree que las mujeres se ponen de parto.
Este es el momento en el que disminuye su tamaño opticamente, vemos menos superficie. Es la última de las cuatro fases del ciclo lunar. Es el momento perfecto para concluir proyectos, reflexionar y resaltar lo positivo de las viviencias que hemos tenido. En cuanto al sueño, este vuelve a recuperarse y a ser de mejor calidad.
Una de las conclusiones del estudio es que las fases lunares afectan más a la calidad del sueño de los hombres que a la de las mujeres. Los peores momentos para dormir, si nos basamos en nuestro satélite son la creciente y la llena. Podemos tenerlo en cuenta para esos días intentar tener una higiene del sueño mejor: acostarnos antes, tomar una infusión relajante, algunos alimentos concretos o hacer algo de meditación.
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