Esta canción fue publicada en el año 2009, dentro de su quinto trabajo discográfico, Renovatio, aquel con el que este regresaba a sus orígenes con composiciones orgánicas y puras. Ahora, una vez más, Orozco vuelve a visitar esos orígenes, solo que en esta ocasión no lo hace solo.
Ya puedes escuchar el resultado de esta gloriosa unión de voces:
El arte está expuesto a cambios y el resultado de los mismos son nuevas obras que, manteniendo la esencia de la misma, nos despiertan nuevas emociones. La canción experimenta en este caso cambios de tempos, ritmos e instrumentos, además de un piano y unos arreglos que mantienen ese ritmo sereno del tema original.
Eso sí, el resultado final mantiene sólidamente el mismo mensaje y la apuesta de Antonio Orozco para sumergirnos en este viaje de emociones profundas y sinceras, donde renuncia a una vida sin amor.
No hay más mendigo
Ni más que pagar
Que el echarte de menos
Sin más que contar
No hay más miedo sincero
Que no respirar
No más vida ni tiempo
Ni más que pensar
No hay más, no hay más
No hay más
Ni versos, ni noches
No hay más imposibles que no verte
Más mal sueños que perderte
No hay silencios que callen por ti
No hay más ilusiones que tenerte
Más riquezas que quererte
No hay un pobre, más pobre sin ti
No hay más problemas
Ni ganas de andar
No hay distancia más grande
No hay más imposibles que no verte
Más mal sueños que perderte
No hay silencios que callen por ti
No hay más ilusiones que tenerte
Más riquezas que quererte
No hay un pobre, más pobre sin ti
Si no estás, si tú no estás mi vida
No, no hay
Imposibles sin remedio
Sin ruido, sin silencio
No hay más imposibles que no verte
Más mal sueños que perderte
No hay silencios que callen por ti
No hay más ilusiones que tenerte
Más riquezas que quererte
No hay un pobre, más pobre sin ti
No hay más, no hay más
No hay más
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