Es un colaborador veterano, pero rara es la vez que Rafa Mora termina sus intervenciones en Sálvame sin protagonizar algún encontronazo con alguno de sus compañeros. Hace unos días su disputa con Miguel Frigenti dio mucho que hablar por el comentario homófobo que le soltó Rafa Mora y por el que las redes le condenaron.
Este hecho ha vuelto a salir a colación en Sálvame después de que la presentadora Adela González tuviera que intervenir en varias ocasiones para frenar al colaborador por varios comentarios fuera de lugar y salidas de tono constantes. «El otro día estuvo muy feo lo que le dijiste a Frigenti. Fue un comentario muy homófobo y muy feo. Ha habido muchos comentarios así y no se van a volver a consentir», expresaba esta.
Una acusación ante la que él se quiso defender: «Llamarme a mi homófobo está fuera de lugar. Jamás he dicho nada que se me pueda atribuir para formar parte de la escoria de la sociedad«.
La bronca de Rafa Mora y Carmen Alcayde obliga a intervenir a la presentadora
Esta llamada de atención no surgió de la nada, y es que Rafa Mora no había sido correcto en el uso del lenguaje con su compañera Carmen Alcayde y, de nuevo, con Miguel Frigenti.
Frigenti entraba en directo a través de videollamada para tratar el tema del veto a varios colaboradores que había impuesto Alejandra Rubio en su participación en el Deluxe, entre los que se encontraba él. «Llegaste por tus propios méritos, porque vendiste a una persona y viniste a rajar de ella lo más grande«, comentaba Rafa Mora sobre su compañero.
«Cada uno tiene su percha. Lo mío es la información y lo tuyo fueron los cuernos que te puso tu novia. Cada uno está por lo que está, no pasa nada«, replicó Frigenti. Unas palabras que enfadaron a Mora, aunque más lo hizo el aplauso de Carmen Alcayde a las palabras de este. «Soberbio», destacaba esta. «Ah, ¿ha estado soberbio con esto? Pensaba que eras buena tía, pero eres una mierda de persona», expresaba Mora encendido.
Una declaración ante la que la presentadora Adela González no pudo evitar tomar partido. «Oye, ¡no! ¡Ya estamos otra vez! ¡No, no y no!«, sentenciaba esta, asegurándole a Mora que no toleraba que le dijera a una compañera que era «una mierda». Además, le recordaba que no tiene el mismo trato para todos: «Y sí es cierto que hay a ciertas personas a las que le tratas en palmitas y a otras compañeras se le denigra. Eso se nota. A veces hay que rebajar el tono«.
