La copa menstrual es una de las mejores ideas que ha tenido la industria de la higiene femenina. Son ya muchísimas las mujeres que las usan durante los días que menstrúan. Los beneficios son indudables. Son más económicas que las compresas o tampones, tienen menos impacto en el medio ambiente, son cómodas. Están diseñadas para aguantar bastantes horas así que te olvidas de pasar al baño cada poco para cambiarte sobre todo si son los días en los que se sangra en más cantidad. Lo normal es que puedas llevar la copa durante 12 horas sin sufrir fugas. Te puedes duchar o dormir con ellas sin problema.
Las mujeres deben saber cómo colocar la copa para disfrutar de todas sus ventajas y no sufrir ninguna molestia:
Conviene recordar que es muy importante que sea de nuestratalla. Sino iremos incómodas. Quizás sea la parte que más puede costar y sea necesario probar un par de tallas antes de dar con la más adecuada. Los expertos aseguran que si te molesta es que no es tu copa. La talla pequeña la deben usar las mujeres que no hayan tenido relaciones sexuales con penetración. La mediana es la mejor para menores de 30 años que no hayan tenido un parto vaginal. Por último el tamaño grande es para mujeres de más de 30 años o que han tenido un parto vaginal. En la talla influye como imaginarás la edad y las condiciones físicas de la vagina. No tiene nada que ver la cantidad de flujo que tengas.
No tengas prisas en ponértela. Tómate tu tiempo y evita ponerte nerviosa. Si ves que te altera será mejor esperar a un mejor momento. Las primeras veces vas a necesitar un rato para ello. En cuanto tengas práctica lo harás sin darte cuenta.
Con un poco de agua moja la copa antes de colocártela. Dóblala en forma de C. Métela poco a poco en la vagina. Cuándo quieras quitártela deberás pellizcar la parte baja y tirar hacia abajo.
Para evitar malos olores, infecciones debes ser muy cuidadosa con la limpieza de la copa. Pon a hervir agua en un cazo. Cuando el agua esté listo mete la copa durante 4 minutos. No te excedas o te quedarás sin copa.
Desde luego que es un invento y ha llegado el momento de dejar compresas y tampones que además de ser más productos más caros no son muy ecológicos.
