Hay algunos detalles que puedes cuidar para que la vuelta al cole sea algo más sencilla.
Empieza por no dejarles acostarse tarde un par de semanas antes de volver al colegio. Para conseguirlo sin demasiado esfuerzo, puedes proponerles hacer alguna actividad divertida unos días antes de empezar el cole, para la que tengan que madrugar. Asís se irán acostumbrando y el madrugón del primer día será más llevadero.
Además procura despertarles un poquito antes (quince minutos bastarán) la primera semana para evitar las prisas. Puedes motivarles con un apetecible desayuno.
Una buena motivación para volver al cole puede ser hablarles del reencuentro con sus amigos, con los que compartirán sus historias de verano y jugarán, además es muy probable que haya nuevos compañeros.
Durante las primeras semanas intenta echarles una mano con sus deberes, para ellos cada año supone un reto más difícil, ayúdales a organizarse y a pensar, al principio puede costarles un poco.
Ten en cuenta que durante el verano han hecho mucho ejercicio y tenido mucha actividad, por ello es bueno que les apuntes a a alguna actividad extraescolar que les ayude a reducir el estrés y a mantener los niveles de energía.
Y, por último, asegúrate de que sus mochilas se adapten a su peso y altura preferiblemente con ruedas. Si optas por la mochila tradicional ten cuidado de que se ponga las dos asas y de que la lleva a la altura de las lumbares, evitarás lesiones.