El programa consiste en descubrir impostores en medio de cantantes profesionales y ha despertado bastantes críticas por lo repetitivo y complicado y del juego.
A esto se unía que su estreno llegaba con más de quince minutos de retraso, ya que estaba anunciado para las once menos cuarto y finalmente empezaba pasadas las once y tras un inesperado discurso de Pablo Motos sobre el odio y el rencor en ‘El Hormiguero’.
Manel Fuentes conduce el programa en el que le acompañan cómo jurado Ana Milán y Ruth Lorenzo, además de El Monaguillo, Josie y la invitada de esta semana que era Rosario Flores.
Otras reacciones de los telespectadores se han centrado en el funcionamiento del programa, en el que un concursante debe hacer un recorrido para ganar dinero decidiendo si un grupo de personas canta o no canta. Para ello, primero cuenta tan solo con su apariencia, luego lo ve actuar y decide si es o no profesional por su forma de moverse y hacer playback. Si acierta gana 3000 euros y pasa de fase.
Pero no todo han sido críticas, el formato también ha recibido halagos sobre todo por la posibilidad de jugar al mismo tiempo que el jurado y los concursantes, algo que ha encantado al público.