Su utilización es muy sencilla, basta con humedecerlo un poco con agua. Además, puedes recortarlo con el tamaño y la forma que necesites. Eso si, su uso se limita a unas cuantas veces y no se puede reciclar.
Lo puedes encontrar en algunos supermercados, en ferreterías, droguerías y también online por ejemplo en Amazon, pero recuerda que no es nada recomendable usarlo en superficies muy delicadas cómo pantallas, muebles de madera, vitrocerámica o sartenes, ya que puede rayarlas o quitarles el brillo.
Otra zona que acumula muchas suciedad son los rodapiés, marcas de zapatos, manos, rozaduras de carritos, etc…Quedarán estupendos si los frotas con un borrador mágico humedecido y los secas con papel de cocina, por último frota con una toallita para la secadora.
Sirve también para eliminar completamente la suciedad y la grasa incrustada del cristal de la puerta del horno y si tienes niños pequeños seguro que algunas de las paredes de tu casa parecen lienzos, el borrador te ayudará en la ardua tarea de limpiarlas.
Otro uso muy útil de este utensilio es quitar los restos de adhesivo de las etiquetas, sobre todo en los botes de vidrio. También elimina el rotulador permanente. Conseguirás además dejar reluciente el teclado de tu ordenador, para ello desconéctalo y frota suavemente sobre la superficie con el borrador. Elimina también la suciedad de la base de tu plancha, que tanto entorpece a la hora de planchar, para ello coloca el borrador ligeramente humedecido sobre la tabla y pasa por encima rápidamente la plancha caliente y además elimina moho, musgo y manchas rebeldes de tu barandilla y muebles de exterior.
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